La guerra civil sumerge a Liberia en la emergencia sanitaria y nutricional

El caos provocado por la guerra civil ha sumido a Liberia en una alarmante situaci¨®n sanitaria y nutricional, cuyas principales v¨ªctimas son los ni?os, que mueren en una proporci¨®n cinco veces mayor que los adultos y que se encuentran expuestos ahora mismo a la hambruna y el sarampi¨®n. Un equipo de la ONG Acci¨®n Contra el Hambre (ACH) acaba de regresar del interior del pa¨ªs y pinta un panorama alarmante.

La informaci¨®n que llega a Occidente sobre lo que est¨¢ sucediendo en Liberia procede exclusivamente de la capital, Monrovia. Otra fuente de datos habitual en ?frica, las organizaciones humanitarias, est¨¢ cegada: las ONG han tenido que huir, tras ver saqueadas sus sedes y robados todos sus veh¨ªculos por las enloquecidas bandas de faitas (fighters, luchadores). La ¨²nica v¨ªa para conocer qu¨¦ ocurre es el regreso de alg¨²n viajero o los mensajes radiof¨®nicos de los misioneros que permanecen en sus escuelas y hospitales."El 60% de los ni?os de Kakata, en la carretera principal de Abiy¨¢n (Costa de Marfil) a Monrovia, padece desnutrici¨®n", dice Pablo Alcalde, de ACH, "y el 33% la sufre en grado severo. Hay raquitismo, malaria, tuberculosis y, sobre todo, sarampi¨®n". ACH mantiene en Liberia a tres de sus 17 miembros, y los 300 cooperantes locales han seguido trabajando: por eso permanecen abiertos los centros terap¨¦uticos de Monrovia, Buchanan y Gbmanga; e incluso la facci¨®n dominante en el 85% del pa¨ªs, liderada por Charles Taylor, es proclive a la ayuda humanitaria. "Pero el problema es la distribuci¨®n real de esa ayuda", dice Alcalde. "Cada dos kil¨®metros, como quien dice, hay controles con chavales armados y borrachos, y no sabes si vas a seguir viaje: no hay garant¨ªa de que nadie controle realmente a esos chicos".

Las ONG principales debaten en Sierra Leona -donde se trasladaron ante la situaci¨®n insostenible en Liberia, si bien Sierra Leona tambi¨¦n arrastra todos los desastres de la guerra civil- sobre c¨®mo regresar. Hay un obst¨¢culo, y es que ni EE UU ni la UE parecen dispuestas a financiar en breve los programas de asistencia. La Iglesias luterana y cat¨®lica siguen manteniendo el tipo en el socorro a la poblaci¨®n.