El tabaquisimo aumenta en un 60% el riesgo de muerte s¨²bita del reci¨¦n nacido

"Fumar durante el embarazo o en presencia de un beb¨¦ es tan irresponsable y peligroso como conducir bebido". Peter Fleming, experto brit¨¢nico en Pediatr¨ªa y Fisiolog¨ªa del Desarrollo, ha presentado as¨ª el primer estudio cient¨ªfico que demuestra por primera vez con rigor la relaci¨®n entre el tabaquismo y las muertes s¨²bitas de reci¨¦n nacidos. La investigaci¨®n, financiada por el Gobierno del Reino Unido, ha aparecido publicada la pasada semana en el British Medical Journal.

Hasta un 60% de los fallecimientos prematuros puede atribuirse a la exposici¨®n al humo, seg¨²n su equipo de investigadores d¨¦ la Universidad de Bristol. Y no son s¨®lo responsables los padres. Cualquiera que encienda un cigarrillo cerca de una cuna contribuye a la posibilidad de provocar un fallo respiratorio fatal para su peque?o ocupante.

La muerte s¨²bita se lleva a 10 ni?os a la semana en el Reino Unido; seg¨²n las ¨²ltimas estad¨ªsticas disponibles, la incidencia en Espa?a es de 166 muertes al a?o. Los beb¨¦s de dos y tres meses encabezan el grupo de riesgo pero ha habido casos de seis y ocho meses. Fleming, que no analiza la influencia de factores sociales como la escasez de ingresos o la salubridad de la vivienda, compar¨® entre 1993 y 1995 el fallecimiento de 195 beb¨¦s con otros 780 que sobrevivieron.

La posibilidad de un ¨®bito prematuro, inexplicable y abrupto, aumentaba, para los primeros, en dos tercios, "si la embarazada, madre, padre, parientes y amigos fumaban antes o despu¨¦s del nacimiento".

Humo mortal

El estudio describe con precisi¨®n los peligros del tabaquismo. Indica, por ejemplo, que un beb¨¦ dobla sus posibilidades de morir cada hora del d¨ªa que pasa inhalando el humo de los cigarrillos.M¨¢s de 300 peque?os al a?o podr¨ªan salvarse si los humos desaparecieran de su entorno, de acuerdo con sus c¨¢lculos. "Tener un padre fumador en casa es casi tan peligroso como contar con una madre que fuma", ha dicho Fleming.

Consciente de las dificultades que puede suponer abandonar el h¨¢bito, el investigador propone dedicar por lo menos una zona libre de tabaco para el hijo,. "Aunque puede ser una alternativa, lo mejor es siempre arrinconar las cajetillas", advierte.

A la vista de estas conclusiones, el Ministerio de Sanidad y la Fundaci¨®n para el Estudio, de las Muertes Infantiles han preparado una nueva campa?a informativa destinada a padres y parejas, que esperan hijos. Esta vez` al consejo de que duerman boca arriba, con los pies tocando la base de la cuna y sin demasiados agobios de ropa, se a?ade la necesidad de suprimir el tabaco de la "dieta" familiar.

Peter Fleming ha propuesto incluso quien se considere antisocial fumar, cerca de mujeres embarazadas y reci¨¦n nacidos. Tambi¨¦n ha pedido que se endurezcan los procesos de adopci¨®n hasta que se demuestre que los futuros padres, y sus familias, abandonan aficiones perjudiciales como ¨¦sta en beneficio del ni?o.

Un lujo asequible

Aunque esta vez no lo menciona, la, fundaci¨®n reconoce que erradicar el h¨¢bito de fumar de los adolescentes aumentar¨ªa sus posibilidades de tener un hijo sano. En 1994 la revista A los 17 a?os cifraba en un 25% las. muchachas de 15 a?os que ya son asiduas en el Reino Unido.La mayor¨ªa cree que as¨ª mantendr¨¢ la l¨ªnea, pero el problema es que luego no lo dejan. Entre los adultos, las madres solteras y las familias que reciben subsidios estatales fuman m¨¢s del doble que las pertenecientes a clases acomodadas. "Es el ¨²nico lujo que podemos permitirnos", fue la respuesta m¨¢s frecuente ese mismo a?o en otro sondeo financiado por el Ministerio de Sanidad.

Sus responsables reconocen hoy que los consejos dados hasta ahora sobre el particular son "adecuados y correctos" tanto para las gestantes como para las familias en general. "Lo malo es que ambos grupos de riesgo no se protegen siempre llegado el momento".

El Instituto Universitario de Salud Infantil de la propia Universidad de Bristol ha publicado tambi¨¦n un trabajo sobre el tabaco y las gestantes, que se ha visto reforzado por los hallazgos del grupo de Fleming. Dirigido por la catedr¨¢tica de Pediatr¨ªa y An¨¢lisis Perinatales Jean Golding, afirmaba en 1994 que la futura madre fumadora no s¨®lo entorpece el desarrollo normal del feto, dificultando la oxigenaci¨®n y reduciendo su peso.

El tabaquismo tambi¨¦n da?a su fertilidad, sobre todo cuando se trata de ni?as. La posibilidad de tener menstruaciones tempranas, hemorragias durante el primer embarazo y abortos prematuros aumentan en un 29% para estas hijas de fumadoras.