Un paseo hacia el bronce

Conchita tampoco se quedar¨¢ sin medalla. La jugadora aragonesa y Arantxa lograron anoche aumentar a tres el n¨²mero de metales ganados por el tenis espa?ol en Atlanta al conseguir el bronce. La pareja espa?ola derrot¨® a las holandesas Brenda Shultz-McCarthy y Manon Bollegraf por un contundente 6-1 y 6-3. Fue un pl¨¢cido paseo hacia el podio, trazado con una autoridad aplastante. El partido, sumamente tranquilo, tuvo tan poca historia como la que delata el marcador y la hora y nueve minutos en que se prolong¨®. El camino hacia la medalla s¨®lo fue interrumpido por la lluvia, que se empe?a en alterar los horarios y posponer los partidos. El agua, otra vez, s¨®lo aplaz¨® el triunfo.La pareja espa?ola rompi¨® el servicio, de las holandesas ya en el segundo juego del primer set, apret¨® el acelerador y con un juego agresivo gan¨® la primera manga en s¨®lo 24 minutos. Shultz empez¨® a lanzar gritos de deseperaci¨®n, de impotencia, que al menos le sirvieron para adelantarse en la segunda manga. Les dur¨® bien poco. Las espa?olas se colocaron con un 5-3 y zanjaron la t¨ªmida reacci¨®n. La medalla fue suya en la segunda bola de partido.

Arantxa y Conchita se fundieron en un abrazo y decidieron ir a comprobar por s¨ª mismas lo que hab¨ªan observado desde sus sillas mientras se jugaba el partido. "Conchita me dijo", relat¨® Arantxa, "?no es ese Carl Lewis? Volvimos a mirar y, cuando nos fijamos mejor, vimos que era ¨¦l". Lewis, felicit¨® a las espa?olas y se qued¨® con una pelota de recuerdo firmada por ellas. El regal¨® a Arantxa un ejemplar, dedicado, de la revista The Sports Illustrated, en la que ven¨ªa a decirle que era la mejor.