La polic¨ªa francesa desaloja de una iglesia a 10 inmigrantes que llevaban 41 d¨ªas en huelga de hambre

Cientos de agentes de la polic¨ªa francesa entraron ayer al alba en una iglesia de Par¨ªs y se llevaron por la fuerza a 10 personas en huelga de hambre, que fueron ingresadas en distintos hospitales. La Prefectura de Par¨ªs dijo haber actuado por "razones humanitarias", pero los compa?eros de los huelguistas hablaron de violencia y atropellos. El asalto de ayer fue un cap¨ªtulo. m¨¢s en un conflicto que enfrenta desde hace cinco meses a m¨¢s de 300 inmigrantes africanos sin documentaci¨®n contra el Ministerio del Interior.Los 10 indocumentados comenzaron una huelga de hambre el 3 de julio. Quer¨ªan llevar hasta el final una protesta iniciada el 18 de marzo con el objetivo de que se regularizara su situaci¨®n en Francia. Estaban encerrados junto a tres centenares de personas en la iglesia de Saint Bernard, del populoso distrito XVIII de Par¨ªs, cerca de Montmartre. El problema era muy similar en todos los casos: personas que llevaban cuatro, cinco, seis a?os, en Francia, trabajando legalmente mientras se tramitaban sus demandas de asilo pol¨ªtico o residencia, y que un d¨ªa recibieron un no por respuesta y la orden de salir del pa¨ªs.

Desde que, comenzaron su campa?a, los sin papeles de Par¨ªs se convirtieron en portavoces de cientos de miles de Personas forzosamente silenciosas, por clandestinas. En Francia hay entre 350.000 y un mill¨®n de inmigrantes iIegales, seg¨²n las estimaciones.

Declaraci¨®n de guerra

Charles Pasqua, ex ministro del Interior, elabor¨® en 1993 un conjunto, de leyes extremadamente duras. El actual ministro, Jean-Louls Debr¨¦, ha sistematizado. el reenv¨ªo de clandestinos a Africa y ha declarado que la lucha contra la, inmigraci¨®n, ilegal es "la prioridad n¨²mero uno". "Los inmigrantes que protestan no esperan que se les d¨¦ a todos un permiso de residencia indefinido. Lo que quieren es una oportunidad de explicarse, que su caso sea examinado particularmente y se respeten sus derechos", declar¨® ayer St¨¦phane Hessel, ex embajador de Francia y portavoz de los encerrados.Seg¨²n Hessel, la pol¨ªtica de Debr¨¦ es "est¨²pida", "Vulnera los derechos humanos" y "no resuelve los problemas, s¨®lo alimenta la xenofobia de los franceses".

La exigencia m¨¢s repetida por los africanos en las pancartas colocadas en tomo a la iglesia es "un permiso de residencia por 10 a?os y para todos". La campa?a comenz¨® el 18 de marzo, al encerrarse todos en una iglesia. Cuatro d¨ªas despu¨¦s fueron evacuados a golpes por la polic¨ªa, a petici¨®n de la jerarqu¨ªa cat¨®lica, que se vio obligada a disculparse y alegar ignorancia cuando las im¨¢genes fueron difundidas por televisi¨®n.

La protesta sigui¨® en un edificio municipal desocupado, de donde fueron tambi¨¦n expulsados a petici¨®n de la alcald¨ªa de Par¨ªs. Sesenta y dos de los africanos fueron detenidos y repatriados. El 9 de abril, el propio arzobispo de Par¨ªs pidi¨® personalmente a Debr¨¦ que actuara "con humanidad", al menos respecto a un grupo de ilegales en una situaci¨®n imposible: ellos iban a ser expulsados, pero no sus hijos, de nacionalidad francesa. El 10 de abril, el encierro se traslad¨® a un almac¨¦n ferroviario. El 26 de junio, el Gobierno hiz¨® una oferta: un a?o de residencia para 48 personas, ex pulsi¨®n inmediata para el resto. El 4 de julio 10 de los encerrados se declararon en huelga de hambre, bajo la vigilancia de varios docto .res del Servicio de Ayuda M¨¦dica Urgente (SAMU) de Par¨ªs y de M¨¦dicos del Mundo.

La Prefectura de Polic¨ªa afirm¨® ayer que la hospitalizaci¨®n forzosa hab¨ªa sido efectuada con el fin de salvar la vida de los huelguistas. Un portavoz del SAMU neg¨® que fueran esas, las razones, ya que los huelguistas no requer¨ªan internamiento urgente. Cinco de ellos hab¨ªan abandonado ya el hospital ayer por la tarde, y estaban de nuevo en la iglesia de Saint Bernard, donde, segu¨ªa la huelga.