Clinton llega con su tren electoral a Chicago para ser reelegido candidato a la Casa Blanca

Colgado del silbato de su tren como un ni?o con juguete nuevo, con la camisa empapada y un rostro de satisfacci¨®n mientras saluda a las personas concentradas en su recorrido, Bill Clinton confes¨®: "?sta es mi idea del cielo". El paseo concluye hoy. El Expreso del Siglo XXI llega hoy a Chicago despu¨¦s de una gira por cinco Estados que ha devuelto al presidente las cualidades del candidato dem¨®crata de 1992. Pero antes del final, Clinton tendr¨¢ una nueva oferta populista: un plan para combatir el analfabetismo que sufren seis millones de escolares en Estados Unidos.

Cuatro a?os en la Casa Blanca destruyen la comunicaci¨®n con los ciudadanos. Esforzado ¨²ltimamente en reforzar su imagen de l¨ªder centrista y en sacarle partido a un Congreso controlado por los republicanos, Clinton sab¨ªa que necesitaba algo como este tren, que abord¨® el domingo, para rescatar lo mejor del candidato, su naturalidad y su energ¨ªa.Y necesitaba asegurarse de que la gente que no sigue la Convenci¨®n Dem¨®crata por la televisi¨®n lo viera a ¨¦l de cerca y escuchara lo que ten¨ªa que decirles. Ha estrechado miles de manos, se ha dirigido a multitudes reunidas en 15 ciudades -muchas de las cuales no hab¨ªan visto nunca a un presidente- y ha recordado incesantemente los 10 millones de puestos de trabajo que ha creado, el descenso que ha tenido la delincuencia, la ca¨ªda del d¨¦ficit p¨²blico y unos cuantos logros m¨¢s de su Gobierno.

Mucha de la gente ha salido a su camino por curiosidad. Pero algunos han regresado a sus casas con una idea m¨¢s clara sobre su voto el pr¨®ximo 5 de noviembre. "Es maravilloso. He estado junto a ¨¦l y he visto que es un hombre que intenta hacer lo mejor por nosotros", coment¨® Manny May, una de las m¨¢s de 15.000 personas que esperaron desde las seis hasta las once de la noche para escuchar a Clinton en Toledo.Golpeada por la crisis

Su llegada a esta ciudad de Ohio fue muy celebrada, en parte porque en Toledo no hay muchos motivos de entretenimiento. Pero en parte tambi¨¦n porque esta poblaci¨®n industrial, que sufre una decadencia que en nada recuerda a la de la capital manchega de su mismo nombre, est¨¢ necesitada de palabras de aliento. La crisis de la General Motors se ceb¨® aqu¨ª con sa?a, y Clinton es para algunos una esperanza del renacimiento que apenas empieza a vislumbrarse. El presidente visit¨® ayer la planta de los veh¨ªculos jeeps para prometer que "la econom¨ªa marcha por la v¨ªa correcta".

En su recorrido posterior por Michigan, Clinton anunci¨® una inversi¨®n de dos millones y medio de d¨®lares (m¨¢s de 310 millones de pesetas) en un plan de alfabetizaci¨®n para ni?os que todav¨ªa no son capaces de leer aunque est¨¢n en la escuela desde hace dos a?os. Seg¨²n los datos del Gobierno, un 40% de los alumnos de tercer grado, con edades de ocho a?os o m¨¢s, no pueden a¨²n leer sin ayuda de sus maestros.

La baja calidad de las escuelas p¨²blicas en los n¨²cleos urbanos, donde viven las razas minoritarias y los grupos m¨¢s pobres, es una de las principales lacras de Estados Unidos. Antes de que su tren llegue a Chicago, Clinton anunciar¨¢ todav¨ªa una iniciativa m¨¢s sobre medio ambiente, uno de los terrenos en el que se gana el voto de los electores j¨®venes.

Clinton quiere hablar ma?ana ante la convenci¨®n de su partido con la esperanza de haberse reconciliado con sectores perjudicados por su pol¨ªtica en la Casa Blanca, con los pobres que perder¨¢n la asistencia p¨²blica por culpa de la ley que el presidente firm¨® la pasada semana, con los trabajadores de Ohio y Michigan que creyeron haber perdido sus empleos por culpa de la firma del Tratado de Libre Comercio.

Si la estrategia del tren ha funcionado lo tendr¨¢n que decir las encuestas, pero Clinton ha conseguido ocupar el centro de atenci¨®n durante varios d¨ªas en los que su contrincante, Bob Dole, ha estado de vacaciones en California.

El Expreso del Siglo XXI le ha dado tambi¨¦n a la convenci¨®n y al electorado una idea de lo que Clinton pretende para su segundo mandato: persistir en la reducci¨®n del d¨¦ficit, reforzar la educaci¨®n, corregir el sistema sanitario y recortar los programas sociales.