Hillary logra con un poderoso discurso el primer triunfo de Clinton en la convenci¨®n dem¨®crata
Hillary Rodham Clinton lleg¨® a Chicago con el lastre de las cr¨ªticas que pesan sobre ella, vio una convenci¨®n dispuesta a entregarse hasta el final y venci¨® la prueba con un discurso poderoso y tranquilo, en el que abord¨® sus temas preferidos sin dejar de responder a las cr¨ªticas que Bob Dole le hab¨ªa lanzado hace 12 d¨ªas en San Diego. La primera dama, vestida con un traje azul claro, fue acogida con una ovaci¨®n interminable e interrumpida frecuentemente con aplausos. Los delegados ten¨ªan previsto reelegir la pasada madrugada un¨¢nimemente a Clinton como candidato dem¨®crata a la Casa Blanca.
Desde el principio, Hillary se neg¨® a competir con Elizabeth Dole, la esposa del candidato republicano a la presidencia, quien en la convenci¨®n de su partido en San Diego triunf¨® con una cuidada coreograf¨ªa basada en un aseo entre los delegados y "halar del hombre al que amo", seg¨²n dijo. Hillary explic¨® que hab¨ªa decidido pronunciarse sobre que lleva haciendo desde hace m¨¢s de 25 a?os: "Hablar de lo m¨¢s importante que tenemos en el pa¨ªs y en nuestras vidas, los ni?os y la familia".El objetivo, adem¨¢s de contrarrestar la publicidad negativa que le ha acompa?ado en los dos ¨²Itimos a?os debido al fracaso e su reforma sanitaria, al caso Whitewater y diversos embrollos en la Casa Blanca, era el de salir al paso del mensaje republicano e que la Administraci¨®n dem¨®crata debilita los valores familiares. "Para Bill y para m¨ª, la famila ha sido el centro de nuestras vidas", dijo Hillary que se refiri¨® continuamente a Clinton con un c¨¢lido "mi marido" y que no oIvid¨® mencionar que est¨¢ a punto de cumplirse el 21? aniversario de su matrimonio, mensaje que contrasta con los feos divorcios de Newt Gingrich y Bob Dole.
Voto femenino
A partir de ah¨ª, Hillary Clinton habl¨® de lo que preocupa a las mujeres -el cuerpo electoral que llev¨® a los dem¨®cratas a la Casa Blanca y que Bob Dole trata de cortejar- y a los ciudadanos.Anunci¨® que el presidente est¨¢ dispuesto a firmar una ley que evite que las madres tengan que abandonar la cl¨ªnica, por razones econ¨®micas, 24 horas desp¨¦s del parto, y otra que permita m¨¢s flexibilidad en los horarios laborales para que los pares puedan dedicar m¨¢s tiempo sus hijos.Agradeci¨® el esfuerzo de los educadores -atacados duraente por Dole en San Diego-,personal sanitario y polic¨ªas. Descendi¨® tambi¨¦n las ayudas para s enfermos e impedidos que corren peligro por los recortes prepuestarios y los est¨ªmulos fiscales propuestos por la Administraci¨®n para los que adopten ni?os. Toda una serie de cuestiones muy bien recibidas por las mujeres que trabajan y que tienen hijos, entre las que el prestigio de Hillary Clinton est¨¢ m¨¢s alto, y que suponen de un 16% a un 20% e la fuerza electoral.
En San Diego, Dole quiso ridiculizar el libro publicado por Hillary Clinton el pasado a?o dedicado a la educaci¨®n, la familia y la responsabilidad personal. Dole atribuy¨® prop¨®sitos estatalistas al volumen y dijo: "No hace falta una comunidad para criar a un ni?o, lo que hace falta es una familia".
"S¨ª, hace falta una comunidad", afirm¨® con energ¨ªa Hilary, que no se qued¨® ah¨ª y que esgran¨®, entre el delirio de los delegados, una letan¨ªa de alabanzas sobre su marido: "Y hace falta un presidente que crea en las posibilidades de su hija y de todos los ni?os, en la fuerza de su familia y de la familia americana, que crea no s¨®lo en la promesa individual, sino en nuestra promesa como naci¨®n. Hace falta un presidente que no s¨®lo crea en estas cosas, sino que act¨²e. Hace falta Bill Clinton".
Hillary Clinton no renunci¨® a su plan sanitario: "Nuestro pa¨ªs debe encontrar una manera de que las clases trabajadoras y los diez millones de ni?os que no est¨¢n cubiertos por ning¨²n seguro puedan tener atenci¨®n m¨¦dica".
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