"No habr¨¢ crisis si Europa promueve medidas para democratizar Cuba"

"No habr¨¢ crisis si logramos que Europa adopte medidas para promover la democracia en Cuba", afirma el embajador Stuart Eizenstat, de 53 a?os, subsecretario norteamericano de Comercio Internacional, que el pasado 16 de agosto fue nombrado por el presidente Bill Clinton su enviado. especial para desactivar la oposici¨®n internacional que esa legislaci¨®n ha desatado. Con ese objetivo acaba de visitar Espa?a, y en declaraciones a este peri¨®dico a hecho hincapi¨¦ en que ninguna empresa espa?ola figura por ahora en la lista negra de Washington.Eizenstat reconoce que la posici¨®n de Espa?a respecto a la ley Helms-Burton es de rotunda oposici¨®n, lo mismo que la de la Uni¨®n Europea, M¨¦xico y Canad¨¢, pero indica que ello es debido a que esa legislaci¨®n ha sido mal comprendida. "Esa es la raz¨®n por la que el presidente Clinton decidi¨® suspender la aplicaci¨®n de la ley durante seis meses y dar tiempo a desarrollar una estrategia multilateral sobre Cuba", lo que representa un giro importante para EE UU, "cuya pol¨ªtica en los ¨²ltimos 50 a?os ha sido criticada por considerarla unilateral".

"Cuba es un anacronismo hist¨®rico y necesitamos a Europa para que nos ayude a desarrollar el cambio", como lo ha hecho junto a Estados Unidos en el caso de Sur¨¢frica, Chile y Hait¨ª, a?ade. "No hay raz¨®n para que no hagamos lo mismo en Cuba.

Seg¨²n Eizenstat, eso. evitar¨ªa "la tensi¨®n comercial y el peligro de represalias mutuas", y para ello Washington sugiere que los Gobiernos europeos, a trav¨¦s de sus embajadas en la isla, hagan labor de propaganda, distribuyendo, por ejemplo, los peri¨®dicos de su pa¨ªs; poniendo, observadores para, que hagan un seguimiento del- respeto de los derechos humanos por el r¨¦gimen comunista, y realizando una labor de apoyo. a los grupos cubanos que defienden esos derechos.

Otra v¨ªa de acci¨®n ser¨ªan las ONG (organizaciones no gubernamentales) para garantizar el uso correcto de los fondos humanitarios. Y por ¨²ltimo, el sector privado, que deber¨ªa desarrollar unos principios b¨¢sicos empresariales que primen la prosperidad y la libertad de los trabajadores "y no favorezca simplemente al Gobierno cubano".

Pregunta. ?Hay empresas espa?olas en la lista negra de la ley Helms-Burton?

Respuesta. No en esta primera fase. No s¨¦ si las habr¨¢ a corto plazo, pero hoy ninguna est¨¢ afectada por la secci¨®n referente a visados para sus directivos.

P. ?C¨®mo han reaccionado los gobiernos europeos a los principios b¨¢sicos expuestos por usted?

R. En el caso de Espa?a, el Gobierno me ha dicho que ya los est¨¢n desarrollando de forma independiente, y respecto a la ley Helms-Burton me ha expresado su rotunda oposici¨®n, porque considera que va en detrimento de la promoci¨®n de la democracia en Cuba.

P. La Uni¨®n Europea amenaza con recurrir a la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC). ?Puede esto provocar una grave crisis transatl¨¢ntica?

R. Creo que la OMC no es el foro adecuado para plantear una disputa que no es espec¨ªficamente comercial. Estados Unidos respetar¨¢ sus obligaciones internacionales. Se trata de un caso en el que priman las diferencias pol¨ªticas y sobre el m¨¦todo a aplicar para instaurar un proceso democr¨¢tico en Cuba. Recurrir a la OMC exacerbar¨¢ las tensiones entre la UE y Estados Unidos.

P. Pero la ley Helms-Burton ataca intereses comerciales de las empresas europeas y, por tanto, los nacionales de cada pa¨ªs afectado por la legislaci¨®n norteamericana.

R. Eso lo comprendo, pero es porque no se entiende completamente la ley. No se trata de una medida para extender el embargo de Estados Unidos sobre la isla de forma unilateral. S¨®lo se refiere a las empresas que se benefician de las propiedades norteamericanas que fueron confiscadas por el r¨¦gimen de Castro.

P. Se supone que una revoluci¨®n comunista confisca todo...

R. S¨ª, pero en el caso, por ejemplo, de Espa?a, M¨¦xico y Canad¨¢, Cuba pag¨® compensaciones. En el caso de Estados Unidos no pag¨® ni un c¨¦ntimo.

P.Vista la oposici¨®n internacional a esa legislaci¨®n ?hay alguna posibilidad de que la ley sea derogada?

R. Eso yo no lo puedo prever. No veo ninguna intenci¨®n de hacer cambios por parte de la Administraci¨®n del presidente Clinton, pero lo que debe quedar claro es que el presidente puede suspender temporalmente su aplicaci¨®n, como lo hizo en julio durante seis meses, si nos ponemos de acuerdo sobre una estrategia com¨²n para promover la democracia en la isla.

P. ?Cree que con las ideas expuestas por usted a los Gobiernos europeos Cuba podr¨¢ ser una democracia a corto plazo?

R. A corto plazo ser¨¢ muy dif¨ªcil, pero no hay razones para pensar que la. isla va a quedar exenta de los vientos de cambio democr¨¢tico que soplan en todo nuestro hemisferio. Yo creo que Espa?a ha mostrado el camino a seguir a la UE y a otros, de manera independiente, para influir en la transici¨®n hacia la democracia.

P. Hay quien acusa a su pa¨ªs de intentar echar de Cuba a sus competidores extranjeros ante el cambio pol¨ªtico.

R. No es verdad. La ley no proh¨ªbe a ninguna empresa europea comerciar con Cuba; no proh¨ªbe a ninguna compa?¨ªa espa?ola invertir en Cuba. Repito que s¨®lo se limita a las empresas que usen propiedades norteamericanas confiscadas por Castro.