Espana contribur¨ªa "con menos de mil soldados" a una operaci¨®n militar en Zaire, seg¨²n Matutes

El ministro de Exteriores, Abel Matutes, mostr¨® ayer la disposici¨®n de Espa?a a contribuir "con menos de 1.000 soldados" a una fuerza multinacional encargada de asegurar¨¢ llegada de ayuda humanitaria urgente a m¨¢s de un mill¨®n de refugiados en Zaire. La iniciativa para crear esta fuerza, que debe contar con el visto bueno del Consejo de Seguridad de la ONU y la participaci¨®n de Estados Unidos y los pa¨ªses africanos, fue lanzada durante la cumbre bilateral que presidieron en Marsella (Francia) el jefe del Estado franc¨¦s, Jacques Chirac, y el primer ministro espa?ol, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

Matutes explic¨® ayer tarde en el Senado algunos detalles de la iniciativa franco -espa?ola. Seg¨²n dijo, el plan contempla tres fases.En la primera, una fuerza multinacional, a desplegar sobre el terreno lo m¨¢s pronto posible, se encargar¨ªa de asegurar la distribuci¨®n de ayuda entre los refugiados en la provincia zaire?a de Kivu, para evitar una cat¨¢strofe humanitaria. Esta operaci¨®n requerir¨ªa un mandato del Consejo de Seguridad de la ONU, la participaci¨®n de EE UU y de otros pa¨ªses europeos y la aceptaci¨®n de las partes, que garantizar¨ªan el mantenimiento del actual alto el fuego.

La duraci¨®n de esta operaci¨®n ser¨ªa limitada, en tomo a seis meses, de forma que progresivamente las tropas occidentales fueran sustituidas por africanas. En la tercera y ¨²ltima fase, se convocar¨ªa una Conferencia Internacional para abordar los conflictos enquistados en la regi¨®n de los Grandes Lagos, de forma que se evite la repetici¨®n de un genocidio como el que se produjo hace dos a?os en Ruanda y amenaza con desencadenarse ahora al Este de Zaire.

El mionistro indic¨® que, para la primera fase, se estima necesario un contingente de unos 5.000 soldados, de los que Francia se ha mostrado dispuesta a aportar 1.000. "La contribuci¨®n espa?ola ser¨ªa del mismo tenor, m¨¢s reducida, pero siendo uno de los coautores de la iniciativa, tambi¨¦n tendr¨ªamos que ofrecer nuestra solidaridad", explic¨® Matutes. Aun que "lo deseable" es que las tropas desplegadas en tierra fuesen africanas, "nos tememos", agreg¨® "que en una primera etapa sean necesarias fuerzas europeas y norteamericanas".

El titular de Defensa, Eduardo Serra, fue mucho m¨¢s cauto a la hora de evaluar la posible contrib¨²ci¨®n espa?ola, alegando que "hay que ver cu¨¢l es el contingente necesario y qu¨¦ pa¨ªses est¨¢n dispuestos a participar". Hasta ayer, el ¨²nico plan preparado por Defensa era el env¨ªo de un H¨¦rcules que el viemes partir¨¢ con 10 toneladas de ayuda y cinco cooperantes a Kinshasa.

Dos opciones

Expertos militares expresaron su preocupaci¨®n ante una eventual intervenci¨®n espa?ola en el coraz¨®n de ?frica. Dichas fuentes indicaron que Espa?a tiene dos opciones: enviar un peque?o contingente que complemente lo aportado por otros pa¨ªses, como un destacamento a¨¦reo o una compa?¨ªa de transmisiones o zapadores, o contribuir con una fuerza terrestre que no deber¨ªa ser inferior a 1.000 soldados. En septiembre de 1992, agregaron, Espa?a decidi¨® enviar 350 militares a Bosnia, pero casi de inmediato tuvo que aumentarlos hasta 800, ya que el contingente inicial ni siquiera ten¨ªa capacidad para defenderse a s¨ª mismo.

La propuesta franco-espa?ola fue acogida ayer con frialdad por sus socios europeos. El ministro alem¨¢n de Exteriores, Klaus Kinkel, consider¨® "muy dif¨ªcil" el env¨ªo de tropas germanas a Zaire, mientras que su colega italiano, Lamberto Dini, dijo que s¨®lo se plantear¨ªa participar en la operaci¨®n, "a solicitud de todos los pa¨ªses afectados". B¨¦lgica, antigua potencia colonial en la zona, rechaz¨® por boca del jefe de su diplomacia, Erick Derycke, la posibilidad de mandar soldados y el Foreign Office brit¨¢nico indic¨® que "no hay planes inmediatos" al respecto. El presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, explic¨® ayer que el objetivo de la iniciativa, lanzada el lunes mediante una declaraci¨®n conjunta hispano-gala, es desplegar cuanto antes "una fuerza de seguridad con representantes de todos los grandes pa¨ªses, y especialmente de Estados Unidos", que ser¨ªa posteriormente relevada por "una fuerza africana".

El jefe de la diplomacia francesa, Herv¨¦ de Charette, coautor de la iniciativa con Matutes, indic¨® que el contingente "podr¨ªa intervenir en un plazo muy breve", pero es necesario, advirti¨®, que otros asuman tambi¨¦n sus responsabilidades" y, en concreto, los pa¨ªses europeos, EE UU y la Organizaci¨®n para la Unidad Africana (OUA).