Luis Mar¨ªa Anson: "Voy a la Real Academia a aprender"

Don Juan (1994), un ensayo hist¨®rico sobre el Conde de Barcelona, ha sido un superventas, pero su autor, Luis Mar¨ªa Anson, director de Abc, no entra en la Academia Espa?ola como escritor. Est¨¢ convencido: "Voy como periodista". Y m¨¢s: "Voy a cumplir y, sobre todo, voy a aprender. Y estoy seguro de que Juan Luis Cebri¨¢n tambi¨¦n sentir¨¢ lo mismo. Los dos sabemos que entramos en una de las grandes instituciones de este pa¨ªs. All¨ª est¨¢n los grandes sabios del idioma, los que son capaces de discernir en las entra?as de la lengua".Algunos acad¨¦micos proponen una mayor apertura de la Real, incluso que se incorporen escritores como Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, que no tengan la nacionalidad espa?ola. Todo sea en beneficio del idioma. Anson comparte esta preocupaci¨®n y propone incrementar las relaciones con todas las academias latinoamericanas porque "el espa?ol es un idioma ¨²nico y poderoso". El periodista no sabe a¨²n sobre qu¨¦ versar¨¢ s u discurso de ingreso. De la ¨²nica cosa de la que no tiene duda es que ser¨¢ sobre periodismo.

Anson participa de ese esp¨ªritu que impuso Fernando L¨¢zaro Carreter cuando fue elegido director de la Academia en 1991 y que ha contagiado a buena parte de los acad¨¦micos: renovaci¨®n, informatizaci¨®n, defensa del idioma en los medios de comunicaci¨®n. "Desde su fundaci¨®n, han estado en la Academia los grandes creadores del idioma y tambi¨¦n, en tiempos, representantes de diferentes estamentos sociales, como la Iglesia, las Fuerzas Armadas dice Anson. "En este esfuerzo de modernizaci¨®n emprendido me parece un acierto que est¨¦n los medios de comunicaci¨®n por el claro significado que tienen en la sociedad".

Normas de estilo

El director de Abc concede gran importancia a las normas de estilo en los medios. "Ya en mi etapa de Efe redactamos un libro de estilo; luego otro en el diario. Son enormemente ¨²tiles para orientar a los redactores. En este sentido, L¨¢zaro se ha sentido siempre preocupado por incorporar el periodismo a la Academia. Cuando en Efe creamos una unidad de espa?ol para intentar reaccionar con rapidez ante las palabras extranjeras que se impon¨ªan al espa?ol, L¨¢zaro se incorpor¨® a ella. Trabajamos juntos".Los libros de estilo no impiden, no obstante, que se deslicen muchas erratas en los peri¨®dicos. ?Qui¨¦nes cometen m¨¢s errores, los periodistas de la prensa escrita o los de los medios audiovisuales? "Tengo un enorme respeto por mis colegas y no estoy de acuerdo con las cr¨ªticas que se hacen a los profesionales de la radio, la prensa o la televisi¨®n que trabajan siempre con urgencia. Es f¨¢cil escribir en una mesa camilla y sin la premura del tiempo. Probablemente, la cr¨®nica que est¨¢is redactando ahora ir¨¢ directamente a la rotativa. En conjunto, los profesionales de estos medios dan la talla. Tienen un nivel que es muy respetable".

El lenguaje de los periodistas en general es mejor, seg¨²n Anson -"y es f¨¢cil o¨ªrlo en la radio y en la televisi¨®n"- que el de algunos pol¨ªticos y deportistas "que maltratan el idioma". Pese a los elogios, es cr¨ªtico con algunos fallos que violan el libro de estilo de Abc. Por citar un solo ejemplo, no siempre consigue que se escriba "se super¨® una marca" en lugar de "se bati¨® un r¨¦cord".

Anson, como ocurre con los acad¨¦micos electos, rebosa satisfacci¨®n. No lo oculta y admite que tiene "una gran responsabilidad". "EL PA?S y Abc se ocupan de segmentos diferentes y son muy distintos, pero son los dos peri¨®dicos m¨¢s importantes de este pa¨ªs. Nuestra entrada en la Academia es buena para ¨¦sta, para la sociedad y para el periodismo".