Chipre: saber llegar a tiempo
Chipre es una hermosa isla situada en el Mediterr¨¢neo oriental que podr¨ªa llegara reproducir los horrores de la guerra yugoslava. Los elementos b¨¢sicos de la situaci¨®n son los siguientes. Dos comunidades, de origen griego y turco, se asientan hoy en un territorio de 9.251 kil¨®metros cuadrados, con recelos y desencuentros a imagen y semejanza de los mantenidos por sus respectivas madres patria. Asirios, egipcios, griegos, persas y romanos la han controlado a lo largo de su historia y los brit¨¢nicos pusieron fin en 1878 a una consistente dominaci¨®n otomana de tres siglos. Pero se quedaron hasta hace unas d¨¦cadas.En el sur moran los griegos, unos 600.000. En el norte, los turcos, en tomo a 200.000. As¨ª, desde 1974, en que Turqu¨ªa -ante el intento de golpe de Estado, perpetrado por la dictadura de los coroneles entonces vigente en Atenas- invadi¨® la isla y estableci¨® una "rep¨²blica turca del norte de Chipre" carente de reconocimiento internacional. El sur -la Rep¨²blica de Chipre, leg¨ªtima y avalada universalmente- goza de un relativo alto nivel de vida, don agricultura tecnol¨®gicamente cuidada, pr¨®speras actividades portuarias y financiero-comerciales off shore, am¨¦n de un turismo floreciente (2.300.000 visitantes en 1995). La ilegal rep¨²blica norte?a carece de turismo y de esos factores socioecon¨®micos y adem¨¢s padece una significativa inflaci¨®n. El sur griego protagoniza una vida pol¨ªtico-institucional estable, habiendo celebrado sus ¨²ltimas elecciones generales en mayo de 1996 (41 % de los votos para la derecha, 33% para la izquierda).
Pero la riqueza relativa -incluso en las democracias cuando se sienten amenazadas (y ¨¦ste parece ser el caso de la Rep¨²blica de Chipre)- lleva en ocasiones un corolario indeseable: la compra de armamento. Y en ¨¦stas nos hallamos. El Gobierno de Nicosia, capital de la Rep¨²blica, ha anunciado la adquisici¨®n de misiles rusos, de "car¨¢cter defensivo", pero considerados potencialmente ofensivos por Ankara y sus hijos de la patria en Chipre. La isla est¨¢ muy cerca de la costa turca y lejos de la griega. La familia hel¨¦nica alega que la superioridad a¨¦rea turca en la zona debe ser equilibrada, pero el Gobierno de Ankara acaba de hacer manifestaciones contundentes, amenazadoras: "Estamos considerando seriamente una operaci¨®n contra los misiles en el momento oportuno si la Administraci¨®n greco-chipriota desoye las advertencias de Turqu¨ªa", difunde la agencia oficial de noticias. Por su parte, Atenas proclama que est¨¢ comprometida en la defensa de la Rep¨²blica de Chipre y advierte que cualquier acci¨®n militar turca conducir¨ªa a la guerra entre dos aliados (Grecia y Turqu¨ªa) de la OTAN. Si llegan a ser enemigos...
?A qu¨¦ esperamos? ?Se puede exigir m¨¢s claridad de intenciones? Se comienza amenazando con el uso de la fuerza en Chipre (amenaza en s¨ª ya prohibida por la Carta de la ONU) y se termina con un pandem¨®nium greco-turco. Elementos de ignici¨®n abundan. Pobreza en el norte chipriota e inestabilidad social y pol¨ªtica en la madre patria, en un momento en que la sociedad turca debate su identidad (islamismo versus secularismo) y expresa su frustraci¨®n por la complacencia de la UE para con Grecia al tiempo que se dan largas a las aspiraciones de la integraci¨®n de Turqu¨ªa. No se piense, adem¨¢s, que el racionalismo hel¨¦nico impera en todo lugar y en cualquier circunstancia: hace dos a?os un icono tra¨ªdo de un monasterio del monte Athos fue paseado en procesionarias volandas por la Rep¨²blica de Chipre con la intenci¨®n de lograr el favor divino para la causa greco-chipriota. Aun cuando se dan bastantes de los rasgos del famoso paradigma de Huntington sobre el choque de civilizaciones, no hace falta recurrir a ¨¦l para percatarse de que la situaci¨®n es explosiva. Los misiles de la discordia quedar¨ªan instalados en 16 meses. La tan cacareada comunidad internacional dispone de ese tiempo para desactivar otra crisis susceptible de convertirse en guerra / limpieza ¨¦tnica / matanza indiscriminada.
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