Emoci¨®n por el documental 'Tupamaros'

Pepe M¨²jica, de 61 a?os, diputado uruguayo del Frente Ampli¨® y tupamaro, que acudi¨® a la Berlinale para la presentaci¨®n del documental Tupamaros en la secci¨®n Panorama Documental, arranc¨® alguna que otra l¨¢grima entre los espectadores de la pel¨ªcula.Nada menos que 13 a?os, de 1972 a 1985, pas¨® en las c¨¢rceles de la dictadura uruguaya M¨²jica, principal protagonista del documental, de 95 minutos, realizado por la suiza Heidi Specogna, de 38 a?os, y el alem¨¢n Rainer Hoffmann, de 45, a base de entrevistas con varios tupamaros que reflexionan sobre la lucha armada en Uruguay y lo que queda hoy d¨ªa. Una de las entrevistadas reconoce en el documental que vot¨® a favor de la "ejecuci¨®n", asesinato seg¨²n los c¨®digos penales, del asesor policial norteamericano Dan Mitrione.

"Muchas gracias por su vida y por su lucha" dijo a M¨²jica en el coloquio la primera espectadora que intervino, conmovida por el documental, mientras que alguna que otra se secaba una l¨¢grima de los ojos. Se hab¨ªa reunido un p¨²blico adicto y dispuesto al entusiasmo con la lucha armada perdida en ese pa¨ªs lejano del sur.

El personaje central del documental es M¨²jica, guerrillero tupamaro, cultivador de flores y ex¨®tico diputado que llega en motocarro a la imponente sede de la C¨¢mara de Diputados en Montevideo y se inclina por la abolici¨®n de la corbata, al menos "en pa¨ªses como los nuestros donde hace calor".

Record¨® Mujica que Uruguay tiene tres, millones de habitantes, 11 millones de vacas y 20 de ovejas. "Somos un pa¨ªs ganadero, sometido a los vaivenes de la econom¨ªa mundial", dijo. "Nuestra tierra expuls¨® a los hombres. Un campo pobla7do nos hubiera dado sentido de pertenencia. Nos hemos quedado con un campo sin hombres, s¨®lo con vacas. Por eso, los tupamaros hicimos una guerrilla urbana, porque en el campo no hab¨ªa nadie".

En Berl¨ªn, M¨²jica dio todo un recital de la ret¨®rica florida, emotiva y brillante, tan frecuente en los pol¨ªticos, burgueses de su pa¨ªs. "No hay jubilaci¨®n para un revolucionario", dijo M¨²jica en una larga perorata que concluy¨® con un alegato: "Hay que renovarlo todo y volver a empezar". No qued¨® claro si M¨²jica se refer¨ªa a repetir la experiencia de la lucha armada o la parlamentaria, en la que ahora se encuentra involucrado.