Aprendiendo a distinguir
Cu¨¢nta medicina aprendimos con la enfermedad de Franco y cu¨¢nto derecho aprendemos ahora en las m¨¢s diversas ramas: penal, civil, mercantil, administrativo, procesal. Incluso los hinchas del f¨²tbol, antes s¨®lo cultivados para el embrutecimiento del ¨¢nimo y la ronquera vociferante, est¨¢n adquiriendo conocimientos muy especializados en las m¨¢s variadas disciplinas. Del patad¨®n p'alante y del a m¨ª el pelot¨®n, Sabino, que los arrollo, propio de la furia espa?ola, encarnada en aquellos a?os de la posguerra imperial por los jugadores del Athletic de Bilbao, sin soltar las cartillas de racionamiento ni perder de vista las monta?as nevadas, fuimos pasando a la apertura viajera que permiti¨® a los esforzados de la pe?a del hongo acompa?ar al Real Madrid de las Copas de Europa por los pa¨ªses prohibidos al pasaporte hisp¨¢nico. Y es que aquellos forofos ten¨ªan m¨¦ritos indiscutibles para ser considerados inmunes al contagio marxista-leninista irradiado desde algunos de los pa¨ªses de los equipos adversarios.Justo es reconocer c¨®mo desde aquellas cotas remot¨ªsimas se ha pasado a la modernidad de las nuevas tecnolog¨ªas para mayor provecho e ilustraci¨®n de la hinchada. Una ojeada a las p¨¢ginas deportivas servir¨ªa para corroborar c¨®mo ahora los aficionados est¨¢n familiarizados con los asuntos econ¨®micos y cu¨¢nto saben de balances, de cr¨¦ditos, de las m¨¢s ingeniosas f¨®rmulas de ingenier¨ªa financiera, de compraventa de futuros, de deudas con la Seguridad Social y con Hacienda, de derechos de imagen, de merchandising, y c¨®mo est¨¢n muy puestos en todos los pormenores del derecho societario, as¨ª como en las nuevas tecnolog¨ªas digitales. Adem¨¢s, las lesiones, que antes eran una referencia gen¨¦rica, ahora se describen con toda minuciosidad.
En resumen, hora es ya de decir que la prensa deportiva, tantos a?os estigmatizada por los publicitarios, que la minusvaloraban como pasto para incultos con bajo poder adquisitivo, ha contribuido a la educaci¨®n popular de manera decisiva y que su propio objetivo ha pasado a ser declarado de inter¨¦s general en las nuevas leyes.
Pero, volviendo a la otra prensa, la de informaci¨®n general, tambi¨¦n viene prestando grandes servicios en estos tiempos de judicializaci¨®n de la pol¨ªtica, de la filolog¨ªa, y hasta de las bellas artes. As¨ª, por ejemplo (v¨¦ase EL PA?S del 20.4.97, p¨¢gina 30) -me se oye, me se entiende, compa?eros-, estamos aprendiendo a distinguir gracias a Javier G¨®mez de Lia?o entre el hecho indiscutible de que el juez no haya dictado prohibici¨®n alguna para que Jes¨²s de Polanco pueda salir de Espa?a y la realidad comprobable de que se le haya estado denegando por el magistrado, hasta ayer, la autorizaci¨®n expresa que necesita para viajar al extranjero, como consecuencia del procedimiento judicial sobre Sogecable, pese a la inexistencia de medidas cautelares. Parece el regreso a los tiempos de Chumy Ch¨²mez en el diario Madrid, con aquella pancarta esclarecedora de uno de sus dibujos: "Queda rigurosamente prohibido todo lo que no es obligatorio". Algunos estaban acostumbrados a la prepotencia en que se instalaron en tiempos del felipismo, cuando entraban y sal¨ªan de Espa?a a su antojo como si fuera una finca particular, y ahora andan perplejos porque sin que haya prohibici¨®n alguna tampoco tienen las ilimitadas posibilidades de antes para entrar y salir por las fronteras. Conviene, por tanto, proseguir en la conceptualizaci¨®n del derecho, como hizo el juez G¨®mez de Lia?o ante la insistencia del periodista que le interrogaba desde los micr¨®fonos de Onda Cero. El magistrado, despu¨¦s de reconocer que a veces no se explica bien o no se le entiende bien, reafirm¨® que prohibici¨®n, lo que se dice prohibici¨®n, no hay. Otra cosa muy distinta es que Polanco tenga la posibilidad de salir de Espa?a. Y es que hay gente empe?ada en tergiversar los asuntos. La diferencia est¨¢ en que ahora s¨®lo prevalecen los intereses generales, por eso TVE se ha encargado de que la escena de Polanco accediendo a la Audiencia haya sido emitida ya 57 veces.
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