Las italianas rompieron el fuego
Rosanna Della Corte, con 63 a?os, se convirti¨® en julio 1994 en la madre de m¨¢s edad que hab¨ªa dado a luz en el mundo. Su caso reaviv¨® la pol¨¦mica en Italia, ya encendida con los primeros casos de fecundaci¨®n artificial de mujeres menop¨¢usicas. El Vaticano y el Comit¨¦ de Bio¨¦tica -que hab¨ªa fijado la edad m¨¢xima en 51 a?os- condenaron el acontecimiento.El ginec¨®logo de la mam¨¢-abuela, Severino Antinori, no acept¨® la cr¨ªtica y rechaz¨® la autoridad moral de un comit¨¦ del que dijo estaba integrado por "excarcelados" y por pol¨ªticos procesados por pertenecer a la mafia. L'Osservatore Romano, peri¨®dico del Vaticano, rechaz¨® la t¨¦cnica de fecundaci¨®n artificial porque "disocia el acto conyugal de la fecundaci¨®n" y enjuici¨® el caso de "violaci¨®n del proyecto de Dios".
Meses m¨¢s tarde, en octubre, otra italiana, Mar¨ªa Munaretto, dio a luz con 62 a?os. El m¨¦dico que la asisti¨®, Roberto Sposetti, manifest¨® no compartir el m¨¦todo de la inseminacion artificial, pero "como m¨¦dico, no pod¨ªa negarme a ayudarla", declar¨®.
Ya en 1992, otra italiana, de 62 a?os, Concetta Ditessa, marcaba la pauta. Una tuberculosis juvenil le hab¨ªa provocado la esterilidad y no dud¨® en recurrir a una operaci¨®n para que se le implantara un ¨®vulo donado por una amiga. Y Mar¨ªa Munaretto, tambi¨¦n de 62 a?os, secund¨® a Concetta gracias a la donaci¨®n de un ¨®vulo fecundado por su marido.
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