Alemania rememora el terrorismo de hace 20 a?os a trav¨¦s de un docudrama de una cadena p¨²blica
La primera cadena de la televisi¨®n p¨²blica alemana ARD ha logrado con el docudrama Juego mortal, en dos entregas de hora y media de duraci¨®n, emitidas la semana pasada, una reconstrucci¨®n de los sucesos del oto?o de 1977, cuando el terrorismo tuvo seis semanas en jaque al pa¨ªs. El trabajo del director Heinrich Breloer logr¨® una audiencia de cinco millones, de telespectadores, que pudieron conmoverse, informarse e incluso divertirse con un extraordinario producto televisivo que combina asombrosas caracterizaciones de actores con testimonios reales de los protagonistas.
La televisi¨®n p¨²blica alemana se financia con un canon que pagan los telespectadores de unas 2.500 pesetas al mes, no recibe ni un c¨¦ntimo del presupuesto del Estado y apenas emite publicidad. Por supuesto, jam¨¢s corta una pel¨ªcula para pasar un anuncio. La reacci¨®n de un telespectador que recog¨ªa una cr¨®nica de la agencia DPA ante Juego mortal lo dice todo: "Con programas as¨ª da gusto pagar el canon". La cr¨ªtica habl¨® de "obra maestra" y "perfecto relato".En dos d¨ªas seguidos de la semana pasada, en la hora de m¨¢xima audiencia, tras el telediario de las 20.00, la ARD emiti¨® las dos entregas de Juego mortal. La primera, C¨¢rcel del pueblo, recoge los sucesos de aquel oto?o alem¨¢n de hace 20 a?os: desde el secuestro del jefe de la patronal, Hanns-Martin Schleyer, el 5 de septiembre de 1977.1 hasta la toma por un comando de cuatro palestinos del avi¨®n de Lufthansa Landshut, en vuelo entre Palma de Mallorca y Francfort, el 13 de octubre, con 86 pasajeros a bordo. Los dos actos terroristas ten¨ªan como objetivo la liberaci¨®n de los cabecillas de la autodenominada Facci¨®n del Ej¨¦rcito Rojo (RAF) o Grupo Baader-Meinhof, encarcelados en la c¨¢rcel de Staminheirri, en las afueras de Stuttgart.
La segunda parte, El Landshut secuestrado, desarrolla la secuencia de los hechos hasta su culminaci¨®n, el 18 y 19 de octubre, en una apoteosis de sangre: liberaci¨®n de los rehenes del avi¨®n secuestrado en Mogadiscio (Somalia), suicidio de los terroristas Andreas Baader, Gudrun Ensslin y Jan-Carl Raspe en la c¨¢rcel, y el inmediato asesinato de Schleyer.
La historia de aquellas seis semanas, que marcaron para siempre la historia de la Rep¨²blica de Bonn, ya hab¨ªan provocado res puesta del cine, como la excelente obra colectiva de los mejores directores Alemania en oto?o, realizada en caliente, poco despu¨¦s de lo acontecido. El llamado docudrama de Breloer, que cost¨® siete millones de marcos (algo menos de 600 millones de pesetas), llega ahora en televisi¨®n con la perspectiva de 20 a?os. La forma de representaci¨®n elegida resulta una apuesta arriesgada: mezclar los actores con los personajes reales, que muchas veces se superponen en un osado montaje. Se pudieron ver as¨ª secuencias actuadas, que reproducen, por ejemplo, una sesi¨®n del gabinete de crisis en la sede del Gobierno en Bonn, y de inmediato aparece el canciller de entonces, Helmut Schmidt, quien hoy evoca aquellos d¨ªas y la presi¨®n de las decisiones dram¨¢ticas sobre vidas ajenas.
Breloer, especialista en este tipo de trabajos, no se detiene en reflexiones intelectuales, ni moraliza sobre lo acontecido, y se limita a un relato donde se entremezclan lo cinematogr¨¢fico y lo period¨ªstico. De ah¨ª el calificativo de docudrama, que consigue una incre¨ªble veracidad y parecido f¨ªsico entre los actores y los protagonistas reales de los hechos. Adem¨¢s del trabajo de direcci¨®n de actores, la investigaci¨®n period¨ªstica consigui¨® reunir a unos cincuenta protagonistas, de todos los frentes, que rememoran los hechos y sacan a relucir sus sentimientos.
Intervienen pol¨ªticos de Bonn, del Gobierno y la oposici¨®n, que participaron en el gabinete de crisis aquellos d¨ªas; la familia del secuestrado y asesinado Schleyer; dos miembros del grupo Baader-Meinhof, implicados en el secuestro; la ¨²nica palestina superviviente, del comando de cuatro que tom¨® el avi¨®n; el jefe de la unidad antiterrorista policial alemana que dirigi¨® la operaci¨®n de rescate en Mogadiscio; polic¨ªas especializados en terrorismo; carceleros de Staminheim; pilotos de Lufthansa; la azafata del avi¨®n que result¨® herida, y pasajeros de aquel vuelo, que se inici¨® en Mallorca y concluy¨® en Mogadiscio.
Todos ellos desfilan por el docudrama con sus testimonios. Entre el material documental aparecen grabaciones in¨¦ditas realizadas por los secuestradores con su v¨ªctima, Schleyer, en las que suplica a los pol¨ªticos de Bonn que hagan algo para salvar su vida. Este documento estremecedor se combina con el testimonio de la viuda de Schleyer, convertida hoy d¨ªa en una anciana, que muestra su entereza y evoca, desde la perspectiva de los afectados, sus sentimientos ante la decisi¨®n pol¨ªtica de no ceder al chantaje del terrorismo.
Todo este conglomerado ha ofrecido durante tres horas a Alemania la oportunidad de reflexionar, sin caer en patetismos ni moralina barata, sobre sucesos que hace 20 a?os conmocionaron y cambiaron el pa¨ªs.
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