En la muerte de Miguel Angel Blanco Garrido
Cuarenta y ocho horas. Han sido los dos d¨ªas m¨¢s angustiosos de nuestras vidas en el plano social y colectivo. Que una banda de bastardos pueda tener en jaque al pa¨ªs es algo que me hace pensar demasiado y me repugna. Lo ¨²nico que han conseguido es destrozar una familia y una vida, pero no ha sido en balde.Ayer todos ten¨ªamos algo en com¨²n. No era nuestra pasi¨®n futbol¨ªstica. Es algo superior (aunque a algunos nos costase creerlo hace unos meses). Es el amor por la vida y la libertad. Es lo que han conseguido tocamos la fibra y desafiar a los autores materiales de la barbarie, y a los copart¨ªcipes necesarios a un conflicto que tenemos, los dem¨®cratas, ganado de antemano. El terror ha acabado. Ya somos libres. Ya no -tenemos miedo.-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.