La maldici¨®n de Rosaura
La serie de Televisi¨®n Espa?ola Villa Rosaura, escrita por el firmante de estas letras y protagonizada por Rosa Mar¨ªa Sard¨¢ y Ferran Ra?¨¦, es sin duda v¨ªctima de alguna maldici¨®n cuyos or¨ªgenes deber¨ªan ser analizados por sesudos cient¨ªficos y parapsic¨®logos. Se estren¨® a sabiendas de que pocos d¨ªas despu¨¦s comenzaban los campeonatos mundiales de f¨²tbol. Como resultado de tan perspicaz forma de programar, la emisi¨®n de Villa Rosaura fue interrumpida tal n¨²mero de veces que la duraci¨®n de sus 13 cap¨ªtulos se extendi¨® en el tiempo durante seis meses, en lugar de los tres para los que estaba programada.Apenas si se promocion¨®; se emiti¨®, como ya se ha dicho, un domingo s¨ª y tres no, aproximadamente, y el horario de su emisi¨®n se modific¨® sin notific¨¢rselo a los espectadores.
Como resultado, no se cre¨® ning¨²n h¨¢bito de audiencia, y los telespectadores se las vieron y se las desearon para poder seguir las aventuras de Rosaura y recordar lo que hab¨ªa ocurrido en el cap¨ªtulo anterior. Pese a estas desastrosas condiciones de emisi¨®n, la serie obtuvo, seg¨²n los ¨ªndices de audiencia, un share del 26%.
Villa Rosaura fue repuesta en el verano de 1996, tambi¨¦n bajo unos criterios de ¨ªndole misteriosa y herm¨¦tica: se emitieron s¨®lo seis cap¨ªtulos, repartidos an¨¢rquicamente durante junio, julio y agosto.
Dejando a salvo las regulares reposiciones en el Canal Internacional, una nueva. repetici¨®n de esta telecomedia est¨¢ teniendo lugar en estos d¨ªas. ?Podr¨¢n los espectadores espa?oles seguir las peripecias de Rosaura y su familia de una forma normal y continuada? Pues no. Tras la emisi¨®n del primer cap¨ªtulo, el domingo d¨ªa 29 de junio, de nuevo se interrumpe su continuidad el siguiente domingo, 6 de julio; es decir, hace unos d¨ªas.
Aprovechando la proximidad
del aniversario del misterioso aterrizaje alien¨ªgena de Roswell, suceso con el cual est¨¢ sin duda conectada la cuesti¨®n que planteo en esta carta, pregunto: ?cu¨¢l y a qu¨¦ oscuros intereses extraterrestres, marcianos, por m¨¢s se?as, obedece la ominosa maldici¨®n c¨®smica que pesa sobre Villa Rosaura?-
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