Ruiz-Gallard¨®n reclama a Aznar el control de la fundaci¨®n Cajamadrid

La fundaci¨®n Cajamadrid, dependiente de esta entidad financiera, se ha convertido en un nuevo motivo de litigio entre la Administraci¨®n regional, que preside Alberto Ruiz-Gallard¨®n, y el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. El pasado 31 de julio, el ejecutivo auton¨®mico aprob¨® un acuerdo en el que pide a la Administraci¨®n central que anule una resoluci¨®n del pasado 7 de julio por el que se niega a la Comunidad de Madrid las competencias sobre el protectorado de la Fundaci¨®n Cajamadrid.

El protectorado es un organismo que vela por el cumplimiento de los objetivos de la Fundaci¨®n y puede vetar la venta de patrimonio de la misma. La Fundaci¨®n Cajamadrid ayuda desde hace tiempo a la Comunidad y al resto de ayuntamientos de la regi¨®n, principalmente el de Madrid, en distintos proyectos culturales.La consejer¨ªa de Educaci¨®n y Cultura financia todos los a?os una parte importante de su Festival de Oto?o con aportaciones de Cajamadrid. El Ayuntamiento de la capital tambi¨¦n puede acometer distintas obras de reforma del patrimonio hist¨®rico gracias a los fondos de la entidad financiera, que est¨¢ gobernada por un consejo de administraci¨®n donde deciden los pol¨ªticos. Tanto es as¨ª que el actual presidente de Cajamadrid, Miguel Blesa, es amigo personal de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y fue elegido tras una dura batalla iniciada en el verano pasado por los representantes del Partido Popular y pese a la oposici¨®n de los socialistas, que respaldaron en todo momento al anterior presidente, Jaime Terceiro. El Gobierno de Alberto Ruiz-Gallard¨®n reclam¨® hace tiempo el protectorado de la Fundaci¨®n Cultural de Cajamadrid, pero se ha encontrado con el rechazo de la administraci¨®n central. Los dirigentes regionales aseguran que la fundaci¨®n en litigio tiene su sede en Madrid y, por tanto, corresponde a la Comunidad la titularidad del protectorado.

?mbito regional

Pero la Administraci¨®n central sigue defendiendo para s¨ª el protectorado de distintas fundaciones, cuya actividad excede el ¨¢mbito regional.La Fundaci¨®n Cajamadrid no s¨®lo subvenciona y lleva a cabo distintos proyectos culturales en Madrid sino que patrocina obras de reforma del patrimonio hist¨®rico en otras comunidades aut¨®nomas.

Esta disputa jur¨ªdica no es la primera que enfrenta a las autoridades regionales del PP con las nacionales.

Hace tan s¨®lo cuatro meses, el ejecutivo de Alberto Ruiz-Gallard¨®n, exigi¨® las competencias sobre el protectorado de la Fundaci¨®n Teatro L¨ªrico, que gestiona el Teatro Real. La ministra de Educaci¨®n y Cultura, Esperanza Aguirre, se neg¨® a tal exigencia y el conflicto lleg¨® hasta el consejo de ministros. La Comunidad de Madrid plante¨® un recurso previo a la presentaci¨®n de un conflicto de competencias en el Tribunal Constitucional. Pero el consejo de ministros desestim¨® la reclamaci¨®n del Gobierno de Ruiz-Gallard¨®n y mantuvo el protectorado de la Fundaci¨®n Teatro L¨ªrico en manos del departamento de Esperanza Aguirre.

Ruiz-Gallard¨®n no se rindi¨® y present¨® el anunciado recurso ante el Tribunal Constitucional, que decidi¨® hace dos meses admitirlo a tr¨¢mite para dilucidar cual de las dos administraciones lleva raz¨®n.

Con la Fundaci¨®n Cajarnadrid, los equipos de Ruiz-Gallard¨®n y Aznar, han vuelto a chocar. "Se trata s¨®lo de discrepancias jur¨ªdicas", concluy¨® un miembro del Gobierno regional.