"Poco a poco, estamos perdiendo el miedo"
F. J. B. A., de 51 a?os y vecino de Gauteguiz de Arteaga (Vizcaya), se encontraba a las 0.30 horas del s¨¢bado en la plaza de Mercurio, de Gernika, viendo la actuaci¨®n de unos ciclistas con su esposa y su hijo, de 12 a?os, cuando se desat¨® el caos.Una veintena de encapuchados vestidos ¨ªntegramente de negro, que hab¨ªan desembocado en esa zona tras destrozar tres cajeros y sembrar el terror por las terrazas de los bares de la localidad, repletas de clientes que intentaban disfrutar de las fiestas patronales, respondieron con piedras y c¨®cteles m¨®lotov a los vecinos que les increparon. Una mujer recibi¨® una pedrada en la cabeza mientras que F. J. B. A. sufri¨® el impacto de una "bola de fuego" que le quem¨® en una pierna.
El herido, por temor a posibles represalias, no desea revelar su nombre ni su profesi¨®n.
Pregunta. ?C¨®mo se encuentra?
Respuesta. Me encuentro bien. Las heridas no han sido tan graves como podr¨ªa parecer en principio. De hecho, esta ma?ana [por ayer] he estado paseando y, esta tarde voy a bajar a Gernika a seguir con las fiestas.
P. ?Qu¨¦ sucedi¨® en la madrugada del s¨¢bado?
R. Yo estaba con mi mujer, mi hijo y otros familiares en la plaza de Mercurio viendo la actuaci¨®n de unos ciclistas. Entonces aparecieron unos encapuchados y comenzaron a romperlo todo con unas barras de hierro. La gente les insult¨® y ellos empezaron a lanzar bolas de fuego con la mala fortuna de que una me explot¨® a m¨ª.
P. ?Tuvo la impresi¨®n de que el c¨®ctel m¨®lotov iba dirigido a usted en especial?
R. No, no... Iban dirigidos a cualquiera. Igual que me explot¨® a m¨ª le podr¨ªa haber explotado a mi hijo o a cualquiera de los familiares con los que estaba.
P. ?Se hab¨ªa visto envuelto alguna vez en un incidente similar?
R. No, jam¨¢s. En Gernika no suelen pasar estas cosas.
P. ?Cree que la situaci¨®n en Euskadi ha cambiado desde el asesinato del concejal Miguel ?ngel Blanco?
R. Yo creo que ha cambiado mucho. La gente est¨¢ muy quemada con estos sinverg¨¹enzas y se enfrenta a ellos. De hecho, los encapuchados empezaron a lanzar c¨®cteles porque empez¨® a chillarles y decirles que se largaran. Yo creo que, poco a poco, estamos perdiendo el miedo.
P. ?Le han dicho los m¨¦dicos cu¨¢ndo estar¨¢ totalmente recuperado?
R. Ma?ana [hoy] me har¨¢n la primera cura, pero ya hago vida normal. Ni siquiera necesito bast¨®, porque estoy en buena forma f¨ªsica, ya que me gusta el deporte y practico footing y yudo.
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