Gran orquesta 'de bolsillo'

Si brillante ha sido el comienzo de los ciclos de Iberm¨²sica, tambi¨¦n las Juventudes Musicales de Madrid inauguraron su sede extraordinaria con matices de excepci¨®n y a la sombra de la Filarm¨®nica de Berl¨ªn. Fueron sus solistas barrocos los protagonistas de un programa tan atractivo como magistralmente interpretado. Cuatro concertinos y solistas de la orquesta berlinesa formaron junto a ocho colegas la singular¨ªsima "orquesta de bolsillo" que hemos admirado ahora. Son esos solistas, el concertino de la orquesta Rainer Kussmaul, el tambi¨¦n violinista Rainer Sonne, el cabeza de violas Wolfrani Crist y el de violonchelos Georg Faust. Todos ellos tocan con instrumento de extraordinario valor: Stradivarius, Warnerius y Vaullaume.Ante una sala colmada, que no ces¨® en sus aplausos y bravo , S , los solistas barrocos desarrollaron un repertorio muy querido por el gran p¨²blico: Albinoni, Vivaldi, Telemann y Boquerini. Tomasso Albinoni "m¨²sico de viol¨ªn, dilentante ve neto", tan profundamente investigado por Remo Giazotto en los a?os cuarenta, se alza en el panorama de la escuela veneciana por sus acentos de nobleza y melancol¨ªa as¨ª como por la moderaci¨®n de sus soluciones virtuos¨ªsticas que tendr¨¢n en Vivaldi una expresi¨®n m¨¢s decorativa y vivaz.

De Vivaldi y sus C¨²atro estaciones poco hay que escribir, tan asumidas como est¨¢n por los p¨²blicos multitudinarios de cualquier lugar. Como es sabido, los cuatro conciertos se inspiran en otros tantos sonetos de autor an¨®nimo y fueron escritos aproximadamente en 1725. Constituyen un ejemplo temprano de descriptivismo a la vez po¨¦tico y casi minucioso pero sin embargo puede olvidarse el asunto para admirar, sin m¨¢s, la pura belleza objetiva, la admirable continuidad de la andadura y la gracia de este Goldoni de la m¨²sica.

Tanto por la obra como por la interpretaci¨®n del solista de viola, el Concierto en sol mayo . r presenta una variante del estilo general de Telemann, mientras Boquerini, con Scarlatti, el m¨¢s importante m¨²sico italiano madrile?izado, nos llegaba a trav¨¦s del Concierto . para violonchelo en re mayor. Escrito cuando preparaba o comenzaba su residencia en nuestra Corte, puede servir como modelo de estilo sin que falte, en el final, cierto aire hispanizante. Si, a la maestr¨ªa de los solistas a?adimos el inter¨¦s del programa, ser¨¢ f¨¢cil, explicarnos la reacci¨®n, encendida, de la audiencia.