El ejercito 'ocupa' Argelia para prevenir atentados ante las municipales de ma?ana

"Aqu¨ª. Estas tres manchas de sangre. Aqu¨ª es donde se estrellaron los cuerpos de tres beb¨¦s arrojados desde la azotea". Los supervivientes de las matanzas de Sidi Rais (300 v¨ªctimas, hace dos meses) y Bentalha (250 muertos, hace un mes) daban fe ante un grupo de periodistas extranjeros de la persistente memoria del horror en los alrededores de Argel. S¨®lo los pasquines electorales recordaban que ma?ana los ciudadanos eligen por primera vez en siete a?os a sus representantes municipales y provinciales. Y el Ej¨¦rcito, que se ha desplegado en todo el pa¨ªs para garantizar la seguridad en estos comicios clave.

Los soldados son omnipresentes en cruces de carreteras, campos de naranjos de la Mitiya (la f¨¦rtil llanura que rodea la capital) y en las esquinas de esas ciudades fantasma que son Sidi Rais y Bentalha. Codo a codo con ellos, civiles armados por el Estado. El Ej¨¦rcito argelino, unos 150.000 soldados, incrementa hasta 200.000 su n¨²mero de efectivos durante los periodos electorales mediante una prolongaci¨®n temporal del servicio militar obligatorio y la movilizaci¨®n parcial de reservistas. Seg¨²n estimaciones de Le Monde Diplomatique, los llamados grupos de autodefensa o patriotas suman en la actualidad unos 100.000 civiles armados con escopetas de caza o fusiles de asalto anticuados, una cifra similar a la de los guardas comunales, paramilitares que colaboran con la gendarmer¨ªa en la lucha contra la guerrilla islamista. En Sidi Rais, 20 kil¨®metros al sur de Argel, los Kal¨¢shnikov de los patriotas estaban en alto; las casas, ennegrecidas por las explosiones de la madrugada del 28 de agosto, y los restos de sangre ya se hab¨ªan mezclado con los escombros. "Los soldados estaban all¨ª, en el centro del pueblo, a unos 800 metros, pero no pudieron hacer nada", relataba ayer un familiar de cuatro de las v¨ªctimas de la peor matanza ocurrida en Argelia, que hab¨ªa acudido a limpiar la casa de sus parientes. "No s¨¦ c¨®mo pudo ocurrir. Aqu¨ª ¨¦ramos neutrales. ?El FIS? S¨ª claro, aqu¨ª gan¨® el FIS con el 80% de los votos en las municipales de l990", intentaba explicar.En la carretera que va de Sidi Rais a Bentalha, pasando por Baraki, a¨²n quedan pintadas del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS) en los muros. Pero casi todos los ¨¢rboles de las cunetas han sido cortados o quemados para impedir las emboscadas del maquis integrista. Y en los cementerios las filas de l¨¢pidas orientadas hacia La Meca se ordenan sobre tierra reci¨¦n removida, Los soldados en uniforme de camuflaje jalonan la ruta. M¨¢s de 60.000 han sido movilizados para reforzar las tareas habituales de la polic¨ªa y la gendarmer¨ªa.

El grueso de las fuerzas de ¨¦lite del Ej¨¦rcito, sin embargo, se concentra desde el pasado fin de semana en la operaci¨®n del bosque de Bainem, en las afueras de Argel, contra un comando de los Grupos Isl¨¢micos Armados (GIA), y en varios despliegues antiguerrilla en el centro y el oeste del pa¨ªs.

Cerrar el c¨ªrculo

No es previsible que las votaciones de ma?ana marquen un unto de inflexi¨®n en la escalada de violencia en Argelia. Pero presidente Liam¨ªn Zerual retende con estos comicios cerrar el c¨ªrculo del sistema insticional que puso en pie tras ser confirmado en su cargo por las urnas hace dos a?os. La reforma constitucional votada en re fer¨¦ndum en noviembre de 1996 y las legislativas del pasado mes de junio, ganadas por sus seguidores de la Agrupaci¨®n Nacional Democr¨¢tica (RND), se completan ahora con la elecci¨®n de los cargos municipales y de las wilayas (provincias), que designar¨¢n a los dos tercios de miembros del Consejo Nacional (C¨¢mara Alta) que no ser¨¢n nombrados directamente por el presidente Zerual.El alto el fuego decretado por el FIS y su brazo armado, el AIS, no parece estar ya seguro. Un portavoz del FIS en el exilio anunciaba ayer desde Londres que la tregua puede quedar en suspenso si el r¨¦gimen de Argel no cumple su parte del acuerdo y devuelve la libertad de movimientos a su l¨ªder, el jeque Abasi Madani.