Pinillos: "La crisis de la modernidad ha terminado, por fortuna"
El psic¨®logo analiza en 'El coraz¨®n del laberinto' el esp¨ªritu de la posmodernidad
Jos¨¦ Luis Pinillos, de 78 a?os, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa de la Universidad Complutense y miembro del Colegio de Em¨¦ritos, ha aprovechado la jubilaci¨®n acad¨¦mica para estudiar los or¨ªgenes y el desarrollo del pensamiento posmoderno. Ha publicado El coraz¨®n del laberinto (Espasa Calpe) y prepara un nuevo t¨ªtulo menos te¨®rico. "La crisis de la modernidad, de la raz¨®n dogm¨¢tica, ha terminado, afortunadamente" declar¨® ayer Jos¨¦ Luis Pinillos.
Las universidades Complutense y Pontificia de Comillas y el Colegio Libre de Em¨¦ritos se han puesto de acuerdo para organizar un coloquio sobre la obra El coraz¨®n del laberinto, de Jos¨¦ Luis Pinillos. El debate de la posmodernidad ocup¨® la primera mesa redonda, con Augusto Hortal, Juan Masi¨¢, Jacobo Mu?oz y Carlos Bouso?o, junto a Pinillos, quien asistir¨¢ tambi¨¦n a la mesa de esta tarde, sobre la proyecci¨®n del posmodernismo en la cultura actual (Universidad Pontificia de Comillas, en Alberto Aguilera, 23, de Madrid, a las 19.00), con Manuel Maceiras, Antonio Blanch, Juan Manuel Navarro y Bernab¨¦ Sarabia.El coraz¨®n del laberinto es, para el autor, la cr¨®nica del fin de una ¨¦poca, y por sus p¨¢ginas aparecen las historias de antiguos y modernos desde los griegos y romanos hasta los primeros s¨ªntomas de crisis de la modernidad, con Arnold Toynbee, tras la II Guerra Mundial, la aparici¨®n del movimiento posmoderno y el actual debate sobre su vigencia, "las esquelas del posmodernismo", seg¨²n Pinillos.
Rechazos
"Espa?a no entr¨® en la modernidad a tiempo", dice Pinillos, tras enumerar a Felipe II, Trento y el rechazo de la ciencia, a pesar de algunos intentos con la Ilustraci¨®n y Carlos III. En los ¨²ltimos a?os, Pinillos ha podido comprobar en sus viajes a Estados Unidos c¨®mo las mejores universidades publicaban textos sobre lo posmoderno desde distintas disciplinas, desde la arquitectura a la ling¨¹¨ªstica, mientras que en Espa?a "era despreciado y se considera que est¨¢ muerto". "Se ha rechazado la posmodernidad sin haber entrado a fondo en su debate, por alguna causa de mentalidad de la Espa?a profunda. No me parec¨ªa justo y creo que es malo para el pa¨ªs, ya que tambi¨¦n rechazamos el psicoan¨¢lisis, el empirismo, las ciencias experimentales, y es necesario que se establezca un di¨¢logo con lo que hay fuera de Espa?a".El autor de La mente humana (1969) y Principios de Psicolog¨ªa (1975), entre otros t¨ªtulos, se?ala que, pese a la complejidad del tema, hay en Espa?a un "rechazo dogm¨¢tico" a las propuestas del posmodernismo, sobre todo en su lucha contra el totalitarismo y el concepto de totalidad, sobre el que se han manifestado las mujeres, las razas de color, la descolonizaci¨®n, las lenguas vern¨¢culas, los nacionalismos, la juventud. "En el esp¨ªritu posmoderno no hay principios intangibles, ya que el enriquecimiento de la vida humana est¨¢ en la diversidad. Nadie tiene la verdad absoluta sobre las cosas"'.
Pinillos opina que con la modernidad termina una ¨¦poca "que hemos dado por eterna, con un progreso indefinido que se ha venido abajo". "Ahora viene otra ¨¦poca, el posmodernismo y la cr¨ªtica se deben fundar en el conocimiento y no querer enterrarlo sin conocer sus fundamentos. Son ya cuarenta a?os de discusi¨®n sobre la modernidad. Lo posmoderno es un fen¨®meno americano, del Nuevo Mundo, y nosotros somos el mundo hist¨®rico. El posmodernismo es el oleaje que produce el naufragio de la modernidad". Pinillos completar¨¢ su estudio en otro libro, con la proyecci¨®n en las ciencias humanas. "La raz¨®n humana tiene necesidad de perfeccionarse porque es incompleta", afirma.
Babelia
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