Los seis meses del 'clan Rold¨¢n' en el banquillo

El clan funcion¨® hasta el final. Los fiscales Alejandro Luz¨®n y Daniel Campos lo intentaron hasta la extenuaci¨®n, pero los seis meses que ha durado el juicio contra Luis Rold¨¢n no han sido suficientes para romper el silencio que ha unido como una pi?a a los principales procesados en la vista del caso m¨¢s sonado de corrupci¨®n en la reciente historia de Espa?a. Un esc¨¢ndalo sobre el que Felipe Gonz¨¢lez, entonces presidente del Gobierno, confes¨® a Juan Alberto Belloch, su ministro de Justicia e Interior: "Esto se puede llevar a un Gobierno por delante".M¨¢s de diez mil folios de sumario, miles de preguntas, cien testigos y sesiones maratonianas en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Madrid no han conseguido quebrar la firme actitud de todos los acusados y, en especial, la del ex director general de la Guardia Civil y la de su testaferro Jorge Esparza Mart¨ªn, para los que se piden 32 y 15 a?os de c¨¢rcel, respectivamente, por delitos de malversaci¨®n y cohecho, entre otros.

Los labios de Rold¨¢n y Esparza siguen sellados. Ninguno ha hecho el m¨¢s m¨ªnimo amago de vender a su compa?ero de banquillo. Se han negado a contestar a centenares de preguntas. En especial a todas las relativas a la trama suiza, donde los miembros del clan y sus familias depositaron m¨¢s de 3.000 millones de pesetas. El ex director comercial de Huarte, calificado por los fiscales como el cerebro del grupo, fue el introductor de todos en Ginebra y el que ingresaba el dinero en sus cuentas.

En un intento desesperado por salvar a sus clientes, Eugenio Rubio, letrado de Rold¨¢n, y Gonzalo Rodr¨ªguez Mourullo, el penalista que defendi¨® a Esparza, acusaron al contrario de ser el responsable del delito de cohecho que se imputa a sus respectivos defendidos. Pero no dieron datos, ni detalles a cerca de c¨®mo, d¨®nde o por qui¨¦n se cobraban las mordidas a los constructores.

El silencio de los dos principales procesados ha sido especialmente prolongado cuando se les ha interrogado por otros dos significativos miembros del clan: Gabriel Urralburu y Antonio Arag¨®n, ex presidente socialista del Gobierno de Navarra y ex consejero de Obras P¨²blicas de esa comunidad. Ambos est¨¢n procesados en Pamplona por un presunto delito de cohecho continuado. El fiscal pide para ellos 11 once a?os de prisi¨®n, y ser¨¢n juzgados la pr¨®xima primavera.

Frente al escudo protector levantado por Rold¨¢n delante de todos sus presuntos c¨®mplices, el ex director de la Guardia Civil se ha defendido acusando a sus jefes, en especial a Rafael Vera, ex secretario de Estado para la Seguridad, y a Jos¨¦ Luis Corcuera, ex ministro del Interior, a los que responsabiliza de entregarle 500 millones en sobresueldos.

Y ha citado al PSOE como receptor de las comisiones de obras que ¨¦l recaudaba. Pero el rastro del dinero ha demostrado lo contrario. Durante siete a?os, los gastos de sus cuentas millonarias suizas s¨®lo ten¨ªan un beneficiario: ¨¦l, su esposa, sus hijos, su familia pol¨ªtica y sus socios de clan. No aparece ni un s¨®lo c¨¦ntimo transferido a su partido. S¨®lo compras de chal¨¦s en San Bartolom¨¦ (98 millones), un piso en Par¨ªs (108 millones), obras de arte de Christie's (16 millones) y relojes Patek Philippe (4 millones).

Patrimonio. La sociedad Europe Capital S.L., bajo cuyo nombre escritur¨® Rold¨¢n la compra de siete pisos y chal¨¦s, ha sido la columna vertebral del juicio. Todas las acusaciones han coincidido en que esta sociedad patrimonial fue creada para ocultar un rosario de bienes sin despertar sospechas. Su capital social se nutri¨® de comisiones ilegales de obras. Los fiscales han dicho que era imposible que el entonces director de la Guardia Civil comprara viviendas valoradas en m¨¢s de 500 millones con un sueldo de 11 millones de pesetas brutas. Adem¨¢s, ten¨ªa que pagar 250.000 pesetas mensuales a su ex mujer Angeles Cimorra. Las otras cinco casas adquiridas por Rold¨¢n antes de separarse de Cimorra no han sido citadas y han quedado al margen del proceso.

Comisiones ilegales. M¨¢s de 1.200 cheques fueron fraccionados y entrecruzados para borrar su origen, seg¨²n han dictaminado los peritos judiciales. La mayor¨ªa hab¨ªan sido emitidos por las constructoras Huarte, Cubiertas MZOV, Obrasc¨®n, Lain, Aspica y Sierra Comendador, favorecidas todas ellas con obras de cuarteles de la Guardia Civil. Y acabaron en las cuentas personales de Rold¨¢n, y de otros procesados, en el BBV.

Mientras el ex director de la Guardia Civil asegur¨® en el juicio que ignoraba el ingreso en sus cuentas de centenares de millones de pesetas procedentes de estos talones, expuso una versi¨®n exculpatoria sobre un supuesto cobro de comisiones ilegales del PSOE en las que ¨¦l s¨®lo actuaba como correo. Seg¨²n su versi¨®n, Eduardo G¨®mez Basterra, coordinador de la secretar¨ªa de Ram¨®n Rubial, presidente del PSOE, le entreg¨® durante varios a?os decenas de paquetes con dinero de comisiones ilegales por obras que le llevaba personalmente a la direcci¨®n de la Guardia Civil. Pero dijo no haberle visto jam¨¢s. ?Y c¨®mo sab¨ªa que era ¨¦l?, le pregunt¨® el fiscal. "Porque dec¨ªa llamarse as¨ª", contest¨®. Basterra neg¨® ante el tribunal estas acusaciones y el fiscal las calific¨® de "alucinantes". El registro de entradas a la Guardia Civil indica que ninguna persona con ese nombre ha visitado dicho centro.

Las declaraciones de los constructores implicados fueron muy significativas. Salvo Juan Jove Sela, due?o de Sierra Comendador, que reconoci¨® que pagaba a Esparza comisiones de m¨¢s de 100 millones en vest¨ªbulos de hoteles madrile?os, el resto no supo explicar por qu¨¦ 800.122.357 pesetas de sus empresas acabaron en las cuentas de Rold¨¢n. Todas, salvo Aspica, utilizaron facturas falsas "y buscaron un muerto de cara al juicio para salvar su responsabilidad", dijo el fiscal.Mario Caprile, ex presidente de Huarte, lleg¨® a. negar hasta que Esparza fuera director comercial de su compa?¨ªa pese a que ¨¦ste le consigui¨® 17.000 millones en obras de la Guardia Civil. Y se ampar¨® en la figura de un muerto: Alfonso Ochoa de Olza, un antiguo empleado de la compa?¨ªa, para explicar las facturas falsas en las que camuflaban el pago de las comisiones ilegales. S¨®lo a Rold¨¢n, Huarte le abon¨® 558.878.588 pesetas.

Fondos reservados. El argumento de los sobresueldos ha sido el m¨¢s utilizado por Rold¨¢n para explicar su fortuna. Y a medida que avanzaba el juicio su abogado elev¨® la cifra de las gratificaciones para que le cuadraran las cuentas, seg¨²n las acusaciones. El fiscal Alejandro Luz¨®n calific¨® de "vergonzante desfachatez y bajeza aterradora" esta excusa del procesado y asegur¨® que no cobr¨® sobresueldos con cargo a los fondos reservados sino que se apropi¨® de ellos para su enriquecimiento. Luis Gayo, abogado del Estado, sugiri¨® la posible existencia de un sobresueldo de cinco millones mensuales entregados por Vera. Ambos coincidieron en que Rold¨¢n cometi¨® un delito de malversaci¨®n de, al menos, 235 millones.

Los talones de fondos reservados, que ascendieron a 435 millones, fueron transformados en decenas de cheques del BBV y se endosaron a una cuadrilla de parados, alba?iles y carpinteros, cuyas firmas fueron falsificadas.