La sal de la tierra
Muere Francisco Mart¨ªnez Corbal¨¢n: firmaba Pablo Corbal¨¢n no por claridad tipogr¨¢fica, sino por ocultar antecedentes. Fue comunista: poeta, dibujante, combatiente casi infantil: ten¨ªa 16 a?os al comenzar la guerra. Perdi¨® y fue a parar a un campo de concentraci¨®n: con ¨¦l estaban los que iban a matar. Un alf¨¦rez de guardia ten¨ªa su edad; hab¨ªan hecho los mismos estudios: le puso m¨¢s all¨¢ y le dijo: "Sal corriendo". V¨ªctor de la Serna hab¨ªa conocido a su padre, poeta, periodista, rojo: escrib¨ªa versos sat¨ªricos en la Rep¨²blica que se titulaban Aleluyas semanales de los hechos nacionales (creo que el dibujante era Paco L¨®pez Rubio, hermano del autor, Jos¨¦); refugi¨® a Pablo en su peri¨®dico, como a m¨ª. Un d¨ªa detuvieron a Pablo: V¨ªctor le sac¨® diciendo que se trataba de una confusi¨®n con su padre. Trabajamos juntos muchos anos: en Informaciones, en otros sitios. Su poes¨ªa, su dibujo, se hab¨ªan cortado de pronto. Trabaj¨®, en la clandestinidad, para la prensa subterr¨¢nea o medio expl¨ªcita: estuvo en Triunfo, en Litoral (la revista de Domingo Domingu¨ªn, comunista: se suicid¨® en Lima) y tambi¨¦n en Abc. No consigui¨® superar su condici¨®n de vencido. Hizo cr¨ªtica literaria, periodismo. Los que trabajaron con ¨¦l -Conte, Qui?onero- le recuerdan como a un maestro."Hay un sol sobre la tierra: depende de nosotros que no se ponga jam¨¢s. No se trata de hacer una obra maestra de nuestras vidas, sino de las vidas de los otros". La frase es de Claude Roy; podr¨ªa ser un epitafio para Corbal¨¢n, pero la traigo aqu¨ª como epitafio del propio Claude Roy, que muri¨® el s¨¢bado. Estaba inspirado en un poema de Mayakovski: "Estoy all¨ª donde est¨¦ el dolor/ me crucifica la l¨¢grima m¨¢s peque?a" (Mayakovski, poeta ruso, comunista: se suicid¨® en 1930 cuando vio en qu¨¦ se convert¨ªa su revoluci¨®n). Claude Roy era poeta, periodista, novelista (la cita la hago de su, novela Le soleil sur la terre; Julliard, Par¨ªs, 1956); estuvo casado con Loleh Bellon (gran actriz y escritora minoritaria, comunista; tuvo un hijo con Jorge Sempr¨²n, comunista expulsado por el partido, perdedor, converso). Acababa de terminar, a los 82 a?os, sus memorias: un testimonio de nuestro tiempo.
(As¨ª va terminando un gran grupo de h¨¦roes: los comunistas de creencia viva y sana, asesinados por los suyos o por los otros, renegados o suicidas, rabiosos o "muy cansados", como dicen de Roy. Fueron la sal de la tierra).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.