La inteligencia hecha cine
Con gran dominio del oficio due?o de buen gusto y de una infrecuente capacidad para sumergirse en la escritura y filmarla (sin ser suya) desde dentro, como si saliera de su imaginaci¨®n a medida que la filma, el cineasta chino afincado en el cine estadounidense Ang Lee ha demostrado que es uno de los mejores lectores de guiones que existen en el cine de hoy, pues los que elige y rueda se ajustan al mil¨ªmetro a las peculiaridades de su estilo y al alcance de su mirada. Tras su etapa china, lo demostr¨® en una obra tan occidental corno Sentido y sensibilidad, y ahora vuelve a demostrarlo en Tormenta de hielo, que es (como aqu¨¦lla) la historia menos china que pueda imaginarse. El acoplamiento en pocos a?os de Ang Lee a la sensibilidad de la gente de este lado del mundo es, como poco, sorprendente.Sentido y sensibilidad gan¨® el Oso de Oro del Festival de Berl¨ªn en gran parte debido a la primorosa adaptaci¨®n por Emma Thompson de la novela de Jane Austen, que dio lugar a un gui¨®n mod¨¦lico, en el que Ang Lee se sinti¨® dentro de un traje a medida y movi¨® c¨¢maras y personajes con una pericia y una gracia que debieron dar mucha envidia -lecciones de un chino en un asunto de ra¨ªz archibrit¨¢nica- a sus colegas ingleses. Y ahora en Tormenta de hielo, que gan¨® en Cannes el premio al mejor gui¨®n, vuelve a lo mismo y, ya distanciado Ang Lee de su inclinaci¨®n inicial a contar historias sobre la vida de la familia tradicional china, se sumerge en el modelo m¨¢s lejano posible a ¨¦sta y entra -con desparpajo, como si hubiera crecido en una de ellas- en el mundo de paredes adentro de una familia de la burgues¨ªa intelectual y liberal estadounidense -los progres de entonces, ya maduros y en retroceso de sus convicciones veintea?eras- de los a?os setenta. Es resultado es una dura y buen¨ªsima pel¨ªcula.
Tormenta de hielo Direcci¨®n: Ang Lee
Gui¨®n: James Schamus, basada en la novela de Rick Moody. M¨²sica: Michael Danna. EE UU, 1997. Int¨¦rpretes: Kevin Kline, Joan Allen, Sigourney Weaver, Henry Czerny, Adam Hann Byrd, Tobey Maguire, Christina Ricci, Jamey Sheridan, Elijah Wood. Madrid: Palafox, Excelsior, Ode¨®n Plaza Aluche, Liceo, Imperial, Lido, Conde Duque y (en V. O. S.) Rosales eIdeal.
Contrapunto
El triangulo protagonista que trenzan Kevin Kline, Joan Allen y Sigourney Weawer, arropado, por un ancho reparto donde cada personaje encaja en el conjunto como una pieza de reloj en el mecanismo de ¨¦ste, logra un ejemplar ejercicio de contrapunto entre virtuosos de la comedia dram¨¢tica naturalista. No tiene desperdicio este trenzado coral de personajes, que nos quedan, probablemente como al propio Ang Lee, un poco, lejanos, pero que, gracias al ajuste del director con lo que cuenta -es decir, a su luminosa lectura del gui¨®n- acaba concerni¨¦ndonos y logra convertirse en una historia familiar ¨ªntima, nuestra.Es posible que la distancia china con que Ang Lee ve el ir y venir de estos n¨¢ufragos de lujo en su propia salsa le facilite las cosas y que esa su lejan¨ªa es lo que le permite dar alcance universal a un asunto tan local e incluso tan localista como el que construye Tormenta de hielo. Lo de menos es que, para comprender los rasgos de conducta de estos n¨¢ufragos de una forma de vida a la deriva convenga conocer con detalle el mundo de donde proceden, que es el del sue?o americano -derivado de la epidemia de optimismo que desencaden¨® el kennedysmo en los primeros a?os sesenta- convertido en pesadilla americana por Nixon, cuyo derrumbe levant¨® el polvo que cubr¨ªa las momias de la caverna americana. Mucha gente anta?o l¨²cida qued¨®- atrapada en las ruinas de ese derrumbe moral, y de ah¨ª tira Ang Lee para hacer de esta pel¨ªcula un asunto de todos, lejano pero tocado por la proximidad que imprime a la decena de personajes que maneja.
Intensa, precisa, transparente, inteligent¨ªsima pel¨ªcula, que sigue con extrema nitidez el trazado de un itinerario en forma de emocionante crescendo dram¨¢tico, que desemboca en la larga y extraordinaria secuencia de esa tormenta de hielo que se hace escenario de una fusi¨®n entre comedia y tragedia, sello de estilo muy propio de Ang Lee, que sigue escalando, pel¨ªcula tras pel¨ªcula, un lugar entre los (no abundantes) directores del cine de ahora, que han entendido que saber leer bien un gui¨®n es la primera condici¨®n que requiere dirigir bien una pel¨ªcula.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.