Dos j¨®venes asesinan al prefecto de C¨®rcega
Dos individuos j¨®venes asesinaron anoche a balazos en una calle de Ajaccio (C¨®rcega), al prefecto de la regi¨®n insular, Claude Erignac, primera autoridad de la administaci¨®n francesa en la isla. Los autores se dieron inmediatamente a la fuga. El asesinato es el m¨¢s grave contra un alto funcionario del Estado en la isla mediterr¨¢nea, sacudida desde hace 23 a?os por la violencia de los separatistas corsos. El presidente Jacques Chirac expres¨® "gran consternaci¨®n" por el crimen. Los investigadores no se atreven a confirmar hip¨®tesis alguna sobre el suceso.
Como otros viernes por la noche Erignac, de 60 a?os, y su esposa salieron ayer para asistir a un concierto de m¨²sica cl¨¢sica en el teatro Kallist¨¦. Poco despu¨¦s de las nueve, el alto funcionario dej¨® a su esposa ante la puerta del teatro y a continuaci¨®n aparc¨® su coche en las inmediaciones. Dos individuos, que algunos testigos describieron como "muy j¨®venes" y otros caracterizaron como "dos sombras que se mov¨ªan muy r¨¢pido", se situaron a su espalda y le dispararon en repetidas ocasiones a la cabeza, sin darle opci¨®n alguna de defenderse.La v¨ªctima, que ocupaba el cargo desde 1996, cay¨® de bruces sobre la acera y falleci¨® all¨ª mismo, pocos minutos despu¨¦s. La noticia conmocion¨® y desconcert¨® a la clase pol¨ªtica francesa, remisa anoche a aceptar la hip¨®tesis de que el asesinato hab¨ªa podido ser obra de alguno de los grupos terroristas corsos.
El atentado es el primero mortal del que ha sido v¨ªctima un alto funcionario del Estado en la isla. Pese a que hace s¨®lo dos semanas el Frente de Liberaci¨®n Nacional de C¨®rcega Canal Hist¨®rico (FLNC) dio por terminada la tregua que manten¨ªa desde junio de 1997, tras el triunfo electoral socialista, medios period¨ªsticos corsos se inclinaban por descartar toda implicaci¨®n pol¨ªtica en esta muerte. "Esto no cuadra con el ambiente pol¨ªtico de la isla", comentaban igualmente algunos investigadores policiales del caso.
A la espera de una reivindicaci¨®n tambi¨¦n los medios gubernamentales se mostraron extremadamente prudentes al atribuir la autor¨ªa. "Ninguna hip¨®tesis ocupa un lugar preferente", indicaron portavoces gubernamentales en respuesta a las diferentes interpretaciones de "asesinato pol¨ªtico", "venganza hacia la Administraci¨®n", o "motivaciones personales".
Aunque la primera de estas hip¨®tesis rond¨® en muchas cabezas, todas y cada una de las reacciones de los medios oficiales se mantuvieron en el plano de la denuncia, de la tristeza y el dolor compartido. La posibilidad de que alg¨²n grupo armado nacionalista haya optado por dar un salto cualitativo resulta escalofriante, no s¨®lo para el Gobierno y la sociedad francesa, sino tambi¨¦n para la gran mayor¨ªa, de los ciudadanos corsos.
Algunos expertos han interpretado la ruptura de la tregua del FLNC-Canal Hist¨®rico, el brazo armado de A Cuncolta, como un movimiento t¨¢ctico destinado a abortar el intento de escisi¨®n protagonizado con anterioridad por varias decenas de activistas altamente radicalizados.
Minuto de silencio
A propuesta de la ministra de Trabajo, Martine Aubry, el Parlamento franc¨¦s en pleno interrumpi¨® anoche sus agitados debates sobre el proyecto de ley de la semana laboral de las 35 horas, para guardar un minuto de silencio en memoria del precepto asesinado. Jean Pierre Chev¨¨nement, ministro de Interior, anunci¨® que hoy estar¨¢ en C¨®rcega para dirigir desde el lugar las investigaciones en marcha. "Vamos a poner todos los medios para encontrar y detener a los autores del crimen". El presidente de la rep¨²blica, Jacques Chirac, dedic¨® encendidos elogios a "la capacidad de servicio del precepto".Seg¨²n los testigos, los asesinos huyeron a la carrera tras efectuar una larga serie de disparos, que dej¨® su rastro de casquillos nueve mil¨ªmetros parabelum junto al cad¨¢ver. Los autores del atentado abandonaron durante su huida una pistola marca Beletta del mismo calibre.
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