Un todo
Vitoria vive desde hace un lustro instalada en el podio de las ciudades espa?olas con mayor calidad de vida. Uno de los term¨®metros que miden esa privilegiada posici¨®n es su sensato concepto urban¨ªstico. En 1982, sin embargo, el casco viejo vitoriano no representaba el foco de turismo cultural que es ahora. Fue entonces cuando arranc¨® el Plan Especial de Rehabilitaci¨®n Integrada (Peri).La morfolog¨ªa del casco medieval apenas se ha retocado con el paso de los siglos. Todav¨ªa se mantienen su forma de almendra, las calles estrechas y alargadas, y el marcado sentido del paralelismo que se dej¨® sentir cuando Sancho VI de Navarra fund¨® la ciudad en 1181. El Peri parti¨® de la base de que se deb¨ªa conservar la estructura, al tiempo que se reactivaba la vida social y econ¨®mica. La parte antigua de Vitoria ha renunciado a un edificio-estandarte. Presume de ser un todo, declarado Conjunto Monumental por el Gobierno vasco.
Su belleza se reparte entre varios flancos: la Virgen Blanca, las cuatro torres, los palacios, los Arquillos, el trazado curvo de las calles Correr¨ªa y Cuchiller¨ªa, la catedral...
Diecis¨¦is a?os despu¨¦s de idearse el plan casi todo el patrimonio hist¨®rico est¨¢ renovado, adem¨¢s de 1.100 viviendas. "El casco viejo se ha rehabilitado en un 60 ¨® 70%", eval¨²a Jos¨¦ ?ngel Cuerda, del PNV y alcalde de la ciudad desde que se instaur¨® la democracia. El plan ha contado con la complicidad de los 9.509 habitantes de la zona y juntos, inversi¨®n p¨²blica y privada, han dejado en esta mejora poco m¨¢s de 10.000 millones de pesetas. "El proceso no se ha terminado. Quedan cerca de 800 viviendas m¨¢s por rehabilitar, aunque el ritmo no es igual que antes", apunta Cuerda. Hay a¨²n dos grandes asuntos pendientes: los aparcamientos y la rehabilitaci¨®n social y econ¨®mica, para paliar el envejecimiento de la poblaci¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.