Dominador Hermoso de Mendoza

Cagancho se llama y tiene nombre de torero. Es una joya y dio la vuelta al ruedo ayer en Castell¨®n junto a su inseparable Pablo Hermoso de Mendoza. No es que el caballero de Estella no tenga m¨¦rito. Lo tiene porque es ¨¦l quien est¨¢ hasta dos a?os domando y poniendo a punto a los animales que luego saca a torear. Cagancho, en las primeras galopadas, se llev¨® el toro hasta la tablas, y en un terreno inveros¨ªmil dio todo un pase que enardeci¨®, no s¨®lo a su jinete, que no cre¨ªa salir de aquella suerte. El p¨²blico en pie y aquel caballo esquivando de costado fueron el espect¨¢culo. Clav¨® Hermoso de Mendoza siempre al estribo. Con Chicuelo lo hizo de cara al rostro girando, al salir de la suerte, sobre s¨ª mismo como si fuera goma. Y todo es doma y dominio de la monta o viceversa, al gusto.Tambi¨¦n estuvieron otros rejoneadores. El caso es que ese p¨²blico tan benevolente y alegre que suele acudir al rejoneo incluso lleg¨® a pitar a Luis Domech. Tras una faena discreta mat¨® de rejonazo infame en el costillar. Tambi¨¦n estuvo pero incluso no hubiera querido estar Paco Ojeda. Clav¨® con cierta correcci¨®n los rejones de castigo, pero al quiebro en banderillas se le neg¨® el caballo y la suerte. Entre empinadas y otros adornos ecuestres pas¨® Ojeda hasta rematar una lidia que tambi¨¦n se neg¨® brillante en el rej¨®n de muerte que hizo guardia. Pero el nombre y la monta efectista le valieron una oreja. La misma que se gan¨® el joven alicantino Andy Cartagena, quien se luci¨® en la suerte del viol¨ªn, hizo alguna pasada en falso pero sobre todo mat¨® de soberbio rejonazo de efectos fulminantes. Recibi¨® una oreja. El presidente injustamente en cambio se llev¨® una descomunal bronca, y el p¨²blico le increp¨® con el nombre de otro equino.