Sainz opta al triunfo en Portugal

El Rally de Portugal afronta hoy su jornada final con todo por decidir, A falta de los ¨²ltimos 100 kil¨®metros cronometrados, la situaci¨®n se presenta casi tan abierta como al principio: apenas medio minuto separa a los cuatro primeros, encabezados por el escoc¨¦s Colin McRae (Subaru). En ese grupo exclusivo se encuentra Carlos Sainz (Toyota), uno de los que sobrevivieron ayer a una etapa tremenda. El espa?ol, que parte tercero a 27 segundos del l¨ªder, puede aumentar hoy su ventaja al frente del Mundial.No se libr¨® del infierno portugu¨¦s ni uno solo de los notables. Los ¨¢speros caminos del recorrido tendieron una trampa tras otra y los pilotos cayeron por turnos en ellas. Se equivoc¨® quien crey¨® que McRae hab¨ªa sentenciado la carrera el primer d¨ªa. Al contrario, la segunda jornada ofreci¨® rally del bueno, intriga en estado puro. En Arganil, una de las zonas m¨¢s famosas del Mundial, hubo igualdad, aver¨ªas, accidentes, pinchazos... y golpes de efecto en casi cada tramo.

Empez¨® la jornada con los temores de McRae. El l¨ªder no sab¨ªa si el motor le iba a aguantar. Sin embargo, la m¨¢quina respondi¨®, aunque de entrada se verific¨® que coche y piloto no formaban el mismo binomio imbatible de la v¨ªspera.

Fue el campe¨®n del mundo Tommi Makinen (Mitsubishi) quien parti¨® al ataque, dispuesto a recortar la desventaja. Pero su intento dur¨® poco. Como hizo a principio de temporada en Montecarlo, el finland¨¦s estrell¨® enseguida su coche contra un ¨¢rbol. Lleva tres retiradas en cuatro carreras.

Makinen abri¨® la lista de bajas importantes. Despu¨¦s vendr¨ªan los abandonos del sueco Thomas Radstrom (Toyota), que destroz¨® una rueda contra una roca, y del franc¨¦s Didier Auriol (Toyota), v¨ªctima de la persistente inoperancia de su cambio de marchas.

Pero el parte de incidentes result¨® mucho m¨¢s amplio. Sainz fue de los primeros en apuntar su nombre. En el tercer tramo del d¨ªa, cuando ocupaba la tercera posici¨®n a casi un minuto d¨¦ McRae, se rompi¨® un latiguillo de la bomba del freno. Al piloto madrile?o le cost¨® 25 segundos y bajar del tercer al quinto lugar.

Pareci¨® que all¨ª se perd¨ªan muchas de las posibilidades de Sainz, pues esos segundos eran importantes dada la igualdad entre los mejores. Sin embargo, como siempre, quedaba mucho rally. El siguiente tramo abri¨® la esperanza del pelot¨®n de perseguidores.

McRae pinch¨® y las diferencias se estrecharon de nuevo. Al escoc¨¦s se le volvieron a acercar el fin¨¦s Juha Kankkunen (Ford), el ingl¨¦s Richard Bruns (Mitsubishi), el belga Freddie Loix (Toyota) ... y Carlos Sainz.

El bicampe¨®n espa?ol aprovech¨® que se hab¨ªa retrasado para cambiar los reglajes de suspensiones. Y el invento funcion¨®. Su propia recuperaci¨®n y la aver¨ªa de Kankkunen -corri¨® los ¨²ltimos tramos sin tracci¨®n delantera y perdi¨® tres minutos- le llevaron a acabar la etapa cerca de McRae, y a la estela de Loix, su sorprendente escudero. El belga, tercer hombre del equipo oficial Toyota, fue la sorpresa del d¨ªa -es segundo en la general, a 11 segundos de McRae-, aunque no tanto si se considera que el a?o pasado ya acab¨® segundo en Portugal y que fue ¨¦l quien desarroll¨® el nuevo Corolla durante 1997.

"A¨²n tenemos opciones", reconoci¨® Sainz. Le quedan por delante ocho tramos y 100 kil¨®metros cronometrados para atacar el liderato de McRae, y tanto si lo consigue como si logra terminar entre los tres primeros, la suya ser¨¢ una excelente operaci¨®n en el Mundial. S¨®lo necesita no sufrir incidentes y mantener a raya a Burns, que ayer se situ¨® ocho segundos por detr¨¢s del espa?ol.