El dilema del banco
LA EVOLUCI?N del ¨ªndice de precios al consumo (IPC) ha vuelto a sorprender, de forma positiva, a propios y extra?os. A diferencia de lo que ocurri¨® el mes anterior, el registro favorable de marzo viene acompa?ado de una reducci¨®n significativa del componente m¨¢s ind¨®mito: los precios de los servicios. Este benigno comportamiento de la inflaci¨®n en el primer trimestre del a?o favorece en mayor medida de lo previsto una tasa para el conjunto del a?o en el entorno del 2%. Ese contexto no ha impedido que el Banco de Espa?a decidiera ayer mantener inalterable su tipo de inter¨¦s oficial. La decisi¨®n no ser¨ªa significativa, dado el ritmo de crecimiento de la econom¨ªa y el pulso de la demanda interna, si no fuera por esa ineludible necesidad de situar ese tipo de inter¨¦s en el nivel en el que previsiblemente se situar¨¢ el del euro, sin duda mucho m¨¢s pr¨®ximo al 3,30% que tiene actualmente el Bundesbank que al 4,5% espa?ol. Pero el Banco de Espa?a, que redujo hace un mes el precio del dinero con una tasa de inflaci¨®n menos favorable, se ha encontrado preso de las declaraciones que su gobernador hizo ante la Comisi¨®n de Econom¨ªa del Congreso hace un par de semanas, asegurando que no habr¨ªa rebajas adicionales en el futuro inmediato. Seguramente Luis ?ngel Rojo prefiri¨® correr el riesgo de un compromiso que le ata -relativamente- las manos antes que alimentar a¨²n m¨¢s la euforia de los mercados, a la que, casi por definici¨®n, debe temer la autoridad monetaria. Sobre esta base es razonable esperar que sea el pr¨®ximo 2 de mayo, una vez que se formalice el acceso de Espa?a a la fase final de la uni¨®n monetaria, cuando el Banco de Espa?a lleve a cabo otra reducci¨®n del precio del dinero, en este caso quiz¨¢ m¨¢s significativa. Pero tampoco est¨¢ claro que las circunstancias de la econom¨ªa espa?ola, y en particular las presiones inflacionistas subyacentes, vayan a ser entonces tan favorables como las actuales. Hac¨ªa mucho tiempo que un banco central no se encontraba en una encrucijada similar a la que est¨¢ el de Espa?a.
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