El Extremadura, un valor al alza
El equipo de Almendralejo regresa a la Liga de las estrellas
Una de cada tres personas que viven en ALmendralejo (30.000 habitantes) acude al campo Francisco de la Hera para animar a su equipo. El f¨²tbol convertido en pasi¨®n diaria. A?¨¢dase la fuerza de voluntad, el car¨¢cter y la ilusi¨®n de un pueblo para entender c¨®mo una peque?a poblaci¨®n del medio rural extreme?o, se aupa por segunda vez a la Liga de las Estrellas. ?Los milagros s¨®lo pueden conseguirse en una situaci¨®n como ¨¦sta. Y el milagro del Extremadura es haber sido capaz de meter cada domingo en nuestro estadio a 10.000 personas?, reconoci¨® Pedro Nieto, el presidente del club, euf¨®rico con el nuevo ascenso.En una tierra laboriosa, de vi?edos y olivares, el cura don Jes¨²s, carism¨¢tico personaje ligado al club, solt¨® una de las suyas: ?Sin menospreciar a los caldos de esta tierra, hoy tendremos que brindar con vino de Rioja? Y es que el Logro?¨¦s precipit¨® ayer los acontecimientos: ??C¨®mo van??. Sobre el tractor que circulaba a un ritmo pausado, frente al quiosco de Kiko Marrufo, un agricultor pregunt¨® por el resultado del partido Las Palmas-Logro?¨¦s: ??Venga ya!?, explicit¨® incr¨¦dulo. Nadie en Almendralejo imagin¨® un domingo tan pl¨¢cido. Al mediod¨ªa parec¨ªa una ciudad fantasma. Calles desiertas y s¨®lo algunos parroquianos en los bares contemplando el partido por televisi¨®n. El primer gol del Logro?¨¦s ya avis¨® de que algo ocurr¨ªa tras los muros de las viviendas. Con el tercero la gente se ech¨® a la calle y tras el cuarto se inici¨® la fiesta.
Desde la pe?a Biri Biri, situada en el primer piso de un inmueble cercano a la fuente del Ri?¨®n, donde la gente desat¨® su alegr¨ªa ba?¨¢ndose, una gigantesca goma se desliz¨® hasta la calle. Fue el m¨¦todo elegido para hacer llegar cava a todos los que se encontraban abajo. A pocos metros, en la pe?a El Har¨¦n, muchachas con el rostro pintado de azul y grana saludaron el paso de Glucevic y Tirado. ?Que se jodan los que se fueron?. Tirado ten¨ªa as¨ª un duro recuerdo para los que abandonaron el barco en Segunda. A su lado, Ram¨®n Ruiz, el vicepresidente, recordaba el capital social del club: ?Ciento seis millones de pesetas y algunos millones en la cartilla de ahorro?, dec¨ªa jact¨¢ndose de esa condici¨®n de equipo hormiga que rodea al Extremadura.
Glucevic, el goleador, era un hombre feliz y el m¨¢s reclamado por la afici¨®n femenina. Juanito, que ayer cumpli¨® 33 a?os, mostraba su satisfacci¨®n: ?Estoy muy a gusto aqu¨ª. Compr¨¦ acciones por cari?o?, dec¨ªa respondiendo a la pregunta de si el Extremadura era un valor en alza. El t¨¦cnico, Rafa Ben¨ªtez, con semblante tranquilo y relajado, tuvo palabras de cari?o para la ciudad: ??qu¨¦ tiene Almendralejo? La gente est¨¢ volcada con el equipo. Ese cari?o especial que se le tiene al club hace que todos nos motivemos mucho y que sea algo especial?.
M¨¢s de 10.000 personas se concentraron en el campo Francisco de la Hera para rendir tributo a sus ¨ªdolos. Despu¨¦s, en los aleda?os de la ermita de la Piedad la fiesta continu¨®. El alcalde, Manuel Jes¨²s Mor¨¢n, se refiri¨® al Extremadura como ?uno de los grandes clubes de Espa?a?. El capit¨¢n, Pedro Jos¨¦, ped¨ªa disfrutar en la vuelta la Liga de las Estrellas. El presidente, Pedro Nieto, no prometi¨® nada, ?s¨®lo trabajo y humildad?, y dedic¨® el ascenso al hijo del jugador Manuel, fallecido hace unos meses. Hubo recuerdos para la localidad gallega de A Rua, segunda casa del Extremadura. Don Jes¨²s, el p¨¢rroco, barri¨® para casa, evocando palabras b¨ªblicas: ?H¨¢gase tu voluntad, y se hizo?.
Pocos apostaron por el retorno del Extremadura a Primera. Se logr¨® con un presupuesto de 525 millones, sin sus estrellas de la temporada anterior (Montoya, Basualdo, Ito...), pero con un trabajo serio, disciplinado, en un clima de tranquilidad que vio el retorno de Manuel, el ascenso de Glucevic, la brillantez de Fredi, la labor oscura y eficaz de Pedro Jos¨¦, el protagonismo del portero Amador, la inteligencia de Era?a... El Extremadura, otra vez enganchado en lo m¨¢s alto, precisamente cuando se dispone a cumplir el 75 aniversario de su creaci¨®n.
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