Peleas de perros, peleas de hombres
Las peleas organizadas de perros no son exclusivas de las pel¨ªculas. Tambi¨¦n en Euskadi, las crueles luchas entre canes mueven importantes cantidades de dinero. Son combates a peque?o nivel pero, como si de un deporte se tratase, existen diferentes categor¨ªas y las apuestas m¨¢s altas pueden ser de hasta varios millones de pesetas. En un principio son pandillas de j¨®venes las que se hacen con un animal, generalmente un bullterrier, pit bull o rottweiler. La raza es lo de menos, lo importante son sus caracter¨ªsticas f¨ªsicas: cuerpo peque?o, gran fuerza en las mand¨ªbulas, el rabo y las orejas cortados, cabeza grande, morro achatado, patas cortas y los machos, castrados para hacerles menos vulnerables a los ataques del contrincante. En un nivel m¨¢s elevado, el proceso de entrenamiento comienza nada m¨¢s nacer: se les cuelga de las orejas y los que protestan son rechazados. A partir de ese momento se les prepara f¨ªsicamente. Un perro de lucha necesita pelearse con m¨¢s de cien ejemplares para estar en condiciones de afrontar un combate con garant¨ªas para sus due?os y los apostantes. Estos animales que les sirven de sparring son casi siempre robados, en centros de acogida de animales abandonados o a sus propietarios. En el ultimo caso, el procedimiento m¨¢s habitual es utilizar perras en celo para atraerles y posteriormente introducirlos en una furgoneta. Nadie vuelve a saber nada de ellos. En Bilbao, por ejemplo, la Asociaci¨®n Protectora de Animales ha denunciado ante la Polic¨ªa Municipal la existencia de una furgoneta blanca que act¨²a por los parques de la periferia. Sin embargo los supuestos ladrones aun no han podido ser localizados. En uno de los barrios marginales de la capital vizca¨ªna, Las Cortes, se han descubierto pisos que son utilizados como improvisados criaderos y lugares donde esconder animales robados. Los canes viven en jaulas poco m¨¢s grandes que ellos y raramente se les alimenta. Y es que en la mayor¨ªa de los casos, su vida ser¨¢ corta. Son vendidos a los grandes criadores de perros de pelea o usados por los propios ladrones para adiestrar a sus mascotas. El adiestramiento empieza con cachorros o animales de poca envergadura, contin¨²a con perros m¨¢s grandes que est¨¦n muy d¨¦biles y, en ¨²ltimo t¨¦rmino con ejemplares m¨¢s grandes a los que les han arrancados los dientes y las u?as. Malos tratos y drogas Un grupo de j¨®venes del barrio baracald¨¦s de Cruces fue detenido en el parque de la Orconera por realizar peleas a plena luz del d¨ªa. El detonante fue el ataque de uno de los perros de combate a otro can al que su due?o paseaba por el lugar. ?ste narr¨® que un pit bull avist¨® a su yorkshire, se abalanz¨® sobre ¨¦l, le rompi¨® la columna vertebral, le cort¨® la vena femoral y le parti¨® el h¨ªgado. Cuando el perro est¨¢ entrenado comienzan los combates con peque?as apuestas, que se celebran en parajes poco transitados. Con frecuencia, los animales son dopados para aumentar su agresividad. La vida de los perros de pelea es corta. Los m¨²ltiples combates, las graves heridas que sufren a menudo, las vejaciones que padecen -sus due?os los maltratan, les dejan sin comer para aumentar su agresividad, siempre est¨¢n atados, permanecen ocultos la mayor parte del tiempo- y las drogas que les suministran provoca que su vida no supere los tres a?os, frente a los 12 que viven en condiciones normales. En algunos casos las cantidades apostadas sobrepasan los tres millones de pesetas. Una cifra muy alta en comparaci¨®n con las 250.000 pesetas de multa impuesta a los j¨®venes de Barakaldo. Son muy raras las ocasiones en que las sanciones superan esta cantidad. Los perros que alcanzan cierta reputaci¨®n, son adquiridos por otros due?os que pagan cantidades y las disputas pasan a celebrarse en fincas particulares, con un p¨²blico que puede llegar a apostar varios millones de pesetas aun ganador. A menudo es gente conocida, pero el acceso a un combate de estas caracter¨ªsticas es muy restringido y pocos han podido filmar o fotografiar a sus participantes. El trafico de perros de pelea se esta convirtiendo en un nuevo canal de dinero para los delincuentes de muchas ciudades, porque el precio que han pagado por su mascota, cuando no es fruto de un robo, se puede llegar a multiplicar por cien. Prohibido por peligroso La ley del Parlamento vasco de Protecci¨®n Animal, como otras en Espa?a, proh¨ªbe estas peleas. Sin embargo, en los ¨²ltimos a?os han sido escasas las actuaciones de la Ertzaintza y las polic¨ªas municipales en estos casos. Las asociaciones protectoras de animales reclaman mayor control a las administraciones. Aseguran que en m¨²ltiples ocasiones conocen su existencia pero no hacen nada por evitarlo. Son muchos los que miran al exterior, a Francia en concreto, cuyo Gobierno prohibi¨® recientemente la tenencia de perros pit bull por su peligrosidad. La ley vasca contempla la posibilidad de prohibir la cr¨ªa de determinadas razas caninas por su peligrosidad. El pasado jueves dos bullterrier tuvieron que ser abatidos por la Ertzaintza en Urduliz, cuando asediaban a los habitantes de un caser¨ªo. Antes, los perros hab¨ªan matado a tres canes de la finca.
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