Muere un hombre tiroteado en plena calle en un supuesto ajuste de cuentas
Tres balazos acabaron a la una de la madrugada de ayer con un hombre identificado como Beyza Kucuk, de 38 a?os. Un tiro le alcanz¨® en el codo, otro en el gl¨²teo y el tercero, y probablemente el ¨²ltimo, le entr¨® por la ceja derecha y le pulveriz¨® el cr¨¢neo. La muerte, por un posible ajuste de cuentas, le sorprendi¨® a la altura del n¨²mero 21 de la calle de Fern¨¢ndez de la Hoz. Un lugar solitario en el que qued¨®, junto al cad¨¢ver, un misterio: un rev¨®lver del calibre 38 con los cinco cartuchos percutidos.
El abandono de la supuesta arma del crimen se convirti¨® en una inc¨®gnita para los agentes del Grupo de Homicidios de la Polic¨ªa Judicial: ?por qu¨¦ el asesino dej¨® esa pista? Los primeros datos sobre el caso resultaban confusos. Los investigadores, que ni siquiera daban por bueno el nombre del fallecido, sospechaban que el crimen se debi¨® a un ajuste de cuentas.En el bolsillo de la v¨ªctima, la polic¨ªa judicial encontr¨® un documento expedido por un juzgado de ?cija (Sevilla) en el que consta que la v¨ªctima hab¨ªa sido detenida el pasado 9 de mayo por tr¨¢fico de drogas. Despu¨¦s se descubri¨® que a nombre de Kucuk figuraban dos ¨®rdenes de expulsi¨®n, la ¨²ltima del 14 de mayo.
Los impactos de bala en el cuerpo indican que el hombre fue tiroteado durante una persecuci¨®n o bien por la espalda -de ah¨ª los tiros en el codo y el gl¨²teo- y finalmente rematado con un balazo en la ceja, disparado cara a cara.
Los vecinos, sin embargo, afirmaban que primero oyeron una detonaci¨®n y, tras un silencio, otras cuatro, lo que posiblemente refiere a una secuencia distinta de los hechos. Para ahondar a¨²n m¨¢s las inc¨®gnitas, los vecinos de la calle, una zona residencial de Chamber¨ª en la que por la noche cierran los establecimientos, recordaban que no oyeron ning¨²n grito. "Yo la verdad es que s¨®lo o¨ª cuatro tiros, pero ni una sola llamada de socorro, ni nada parecido. La calle estaba vac¨ªa", se?al¨® el portero del inmueble junto al que fue asesinado Kucuk.
El cad¨¢ver qued¨® tendido en plena acera, entre un coche y una tienda de muebles de oficina. El juez orden¨® que el cuerpo fuese trasladado al Instituto Anat¨®mico Forense para su autopsia. La Polic¨ªa Cient¨ªfica investiga la procedencia del rev¨®lver hallado y su posible uso en el crimen.
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