Los programas informativos aumentan su presencia en las televisiones de Estados Unidos
En un mercado de televisi¨®n en el que no se perdona un solo error en los ¨ªndices de audiencia, las principales cadenas de Estados Unidos parecen haber encontrado un seguro de vida en los programas informativos. Millones de personas escogen cada noche en la ABC, la CBS, la NBC o la Fox espacios de reportajes presentados casi siempre por viejas glorias del periodismo televisivo, como la conocida entrevistadora Barbara Walters. Sin embargo, el auge de la informaci¨®n en horario de m¨¢xima audiencia tiene un precio: algunos de esos programas comienzan a mostrar un cierto tinte amarillo.
Hace menos de cinco a?os los directivos de las cadenas de televisi¨®n consideraban que la secci¨®n de programas informativos era una especie de lastre que les imped¨ªa ofrecer un flujo constante de series y telecomedias. Ahora, esos mismo directivos consideran que la informaci¨®n es una especie de franquicia de la que se pueden obtener suculentos frutos publicitarios.La f¨®rmula de estos programas es muy similar en todas las cadenas. Una hora dividida en cuatro segmentos con reportajes presentados por caras conocidas del periodismo, en ocasiones por los propios conductores de los telediarios de la cadena.
La NBC ha reservado para la pr¨®xima temporada algunas de las mejores horas de su programaci¨®n para estos informativos. Todos los d¨ªas, salvo jueves y s¨¢bados, Dateline NBC, con Jane Pauley y Stone Phillips al frente, ocupar¨¢ la franja horaria de 22.00 a 23.00 horas, la misma que ocupa los jueves la serie Urgencias, la de mayor audiencia en Estados Unidos. La ABC ha reconstituido el programa de reportajes 20/20, con la veterana Barbara Walters, para extenderlo a tres noches por semana. La CBS estudia todav¨ªa la posibilidad de emitir de lunes a viernes m¨¢s espacios del aut¨¦ntico programa estrella de la informaci¨®n televisiva: 60 Minutes, con Mike Wallace y Ed Bradley entre su equipo. Por su parte, la Fox lanza el magazine de noticias Fox Files.
Dateline NBC es el informativo con el ascenso m¨¢s mete¨®rico en los ¨ªndices de audiencia, y es, quiz¨¢ por ello, el que m¨¢s cr¨ªticas recibe por el sensacionalismo con el que impregna algunos de sus contenidos. Una t¨ªpica edici¨®n puede repartir sus cuatro reportajes entre asuntos tan dispares como el caso Lewinsky, acusaciones de acoso sexual en una empresa, un hombre con un billete de loter¨ªa premiado y una entrevista con Harrison Ford. Siempre hay un reportaje que pretende otorgar al programa un cierto aire de periodismo de investigaci¨®n mezclado con informaci¨®n de ¨²ltima hora, y siempre hay tambi¨¦n un asunto que est¨¢ m¨¢s cerca de la prensa rosa o amarilla que del periodismo serio, si es que existe ese concepto.
El productor de Dateline NBC, Neil Shapiro, es criticado por su afici¨®n a los sucesos, pero ¨¦l ha defendido en The New York Times su forma de hacer periodismo: "Buscamos noticias en los m¨¢rgenes de los peri¨®dicos, en las informaciones breves. Tratamos de hacer reportajes sobre aquellas noticias de las que la gente habla en la calle". Cuando a Don Hewitt, productor de 60 Minutes, uno de los hombres m¨¢s respetados del periodismo norteamericano, le pidieron que hiciera una edici¨®n m¨¢s a la semana de ese espacio, respondi¨®: "?Qu¨¦ quer¨¦is, que haga un Dateline NBC?"
Voracidad
El auge de los programas de noticias ha generado una voracidad informativa sin precedentes. Dateline NBC, con sus cuatro ediciones semanales esta ¨²ltima temporada, ha hecho aproximadamente 700 reportajes. El equipo del programa tiene en cada momento 200 reportajes en proceso de realizaci¨®n. En 1993, cuando s¨®lo hab¨ªa una edici¨®n a la semana de este programa, 80 personas trabajaban en redacci¨®n o producci¨®n. A partir de agosto -cuando sean cinco las ediciones semanales- ese equipo ser¨¢ de 320 personas.La raz¨®n fundamental que inclina a los responsables de las grandes cadenas hacia los informativos no tiene nada que ver con el prestigio o el buen periodismo: un espacio de este tipo apenas cuesta la mitad del precio de una serie o una telecomedia, y puede mantenerse en antena durante los meses de verano. Adem¨¢s, las agencias publicitarias inyectan cada vez m¨¢s dinero en los intervalos porque la audiencia es mayoritariamente urbana, es decir, consumidora. Y no hay que olvidar que algunas ediciones de estos programas informativos compiten en la lista de los espacios con m¨¢s ¨¦xito.
?Se puede hablar realmente de una apuesta por la informaci¨®n en las televisiones de Estados Unidos? Muchos piensan que cualquier informaci¨®n es informaci¨®n aunque no sea noticia. Otros lamentan que un g¨¦nero tan hist¨®rico y respetado est¨¦ entreg¨¢ndose a las exigencias del horario de m¨¢xima audiencia.
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