Bombines y 'hooligans', en el asedio de Drumcree
Los j¨®venes protestantes ultras conviven con los orangistas trajeados en la acampada de Portadown
Faltaba s¨®lo la cerveza y los torsos desnudos. En un rinc¨®n del campamento protestante del asedio de Drumcree, Ivan y sus compa?eros orangistas parec¨ªan hooligans a la salida del estadio de f¨²tbol. O sea, la ant¨ªtesis de los protestantes de bomb¨ªn y paraguas que amanecieron ayer con el traje arrugado despu¨¦s de una noche de c¨¢mping forzado con el que intentan imponerse a la ley y marchar sobre Garvaghy Road, el barrio cat¨®lico de Portadown que quieren atravesar, como cada a?o, para conmemorar la victoria protestante sobre los cat¨®licos. Eran esos elementos contrastantes los que dieron ayer a los norirlandeses atrincherados en Drumcree un toque muy brit¨¢nico. Por un lado, los caballeros de la Orden de Orange, el rostro grave bien afeitado. Los zapatos bien lustrados. Se?ores que esperaban pacientemente su turno para plantarse frente a la enorme barricada met¨¢lica que les impide avanzar hacia Garvaghy Road.Por otro lado, Ivan y sus amigos. Repantigados en el c¨¦sped del lugar, dichosos entre bombonas de gas y desperdicios de la noche anterior. ?stos son dignos representantes del desorden de Orange. Y ayer estaban de buen humor.
"Oye, que aunque Sadam Husein no sea cat¨®lico, nos lo cargar¨ªamos igual", grit¨® uno de ellos a un reportero de aspecto medioriental. "Heil Hitler", profiri¨® otro, por si acaso. Grandes risotadas y luego una invitaci¨®n a conversar.
Entre la soldadesca de Drumcree, el odio a los nacionalistas cat¨®licos del Sinn Fein corre fuerte y hondo. "Si alguna vez te has pasado por Garvaghy Road comprender¨¢s por qu¨¦ queremos desfilar por all¨ª", declar¨® Ivan a voz en cuello. Ivan es obrero de una hilander¨ªa de Portadown, la ¨²nica ciudad del Ulster donde existe un gran mural dedicado "en honor" de Billy Wright, el temible l¨ªder ultraprotestante de las implacables Fuerzas de Lealistas Voluntarios (LVF). Acusado de m¨¢s de doce muertes de cat¨®licos republicanos, Billy Rey Rata Wright fue asesinado por prisioneros del IRA en la c¨¢rcel de Maze el a?o pasado. "A esos asquerosos Fennians hay que darles una lecci¨®n de limpieza. Son lo peor, esos malditos cat¨®licos que se escapan al jab¨®n", a?adi¨® en el pr¨®logo de un chiste grosero sobre un hombre y un burro. Ivan arranc¨® todav¨ªa m¨¢s risas y a su alrededor fueron arremolin¨¢ndose m¨¢s j¨®venes protestantes de Portadown, ciudad de mayor¨ªa protestante. Festejaban sus bravatas y sus diatribas contra los cat¨®licos y los extranjeros. No hay duda, Ivan fue ayer con sus chistes el hombre del d¨ªa en esta acampada improvisada en Drumcree.
Dirigentes del protestantismo no se cansan de repetir que su protesta en Drumcree ser¨¢ pac¨ªfica, digna y disciplinada. Ivan y los suyos, sin embargo, son un buen ejemplo de que las mejores intenciones no siempre se materializan. Como los l¨ªderes orangistas de corbata, banda y bomb¨ªn, la comparsa de Billy y sus muchachos dice estar dispuesta a quedarse en Drumcree "hasta el mero final".
Indicios de que el asedio va a durar est¨¢n por doquier. Uno de ellos fue la aparici¨®n ayer del primer negocio en la ciudadela orangista montada en Drumcree. Como en todos los estadios, surgi¨® el quiosco para vender perritos calientes y pescado frito a los congregados. El quiosco lleva el nombre de Showtime. En medio del desaf¨ªo protestante a los soldados brit¨¢nicos y las payasadas de Ivan, resulta apto.
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