La Audiencia deja a un preso viajar a Portugal para que no pierda su empleo

Este principio, interpreta la Audiencia, "conlleva la aplicaci¨®n de las leyes penales a todos los que se encuentren en territorio nacional, pero no exactamente a que las penas hayan de cumplirse en territorio espa?ol". Opina el tribunal que, "en todo caso", ese principio, que "admite muy plurales excepciones", ha de "conjugarse con el de reinserci¨®n de los internos que orienta la legislaci¨®n penitenciaria"."El hecho de que durante unas horas el penado permanezca en Portugal, con la obligaci¨®n de volver a su centro [una vez concluida su tarea profesional], no puede considerarse una quiebra del principio de territorialidad, habida cuenta de que su tratamiento de deshabituaci¨®n es sumamente exitoso y su evoluci¨®n muy favorable".

Permitir al interno viajar a Portugal "tampoco puede considerarse un acto hostil o descort¨¦s para ese Estado; primero, por la m¨ªnima trascendencia de los hechos [el auto no especifica el delito por el que fue juzgado], y segundo porque la preparaci¨®n para la libertad, incluida la deambulatoria", cabe aplicarla ahora "en un nuevo y m¨¢s amplio espacio com¨²n (el de la Uni¨®n Europea, en el que rige el principio de libre circulaci¨®n de personas)".

El tribunal tampoco encuentra ning¨²n obst¨¢culo en Portugal, un pa¨ªs cuya sociedad destaca, explica la Audiencia de Madrid, "por su grado de civismo y tolerancia", y que posee "una legislaci¨®n penal mod¨¦lica y, en mucho aspectos, superior a la espa?ola".