El fracaso de los generales

No era el Nelson Mandela de Nigeria. Era muy rico, amaba el lujo y la buena vida. Fue poderoso durante mucho tiempo y una de las personas que gozaban de los privilegios, del r¨¦gimen, pero Moshood Abiola (...) hab¨ªa logrado encarnar la esperanza de la vuelta a un gobierno civil en el pa¨ªs m¨¢s poblado de ?frica, 115 millones de habitantes, y uno de los m¨¢s ricos. La Junta militar en el poder le encarcel¨® y priv¨® en 1993 de una presidencia ganada con facilidad en las urnas. La esperanza no hab¨ªa hecho m¨¢s que aumentar desde la muerte del jefe de la junta, el general Sani Abacha al principio del verano.

(. ..)La muerte de Abiola ilustra lo que ciment¨® la lucha de Abiola: el fracaso absoluto del r¨¦gimen militar nigeriano. Los generales que detentan el poder desde hace tiempo han fallado en todo. Ellos han encarnado de manera casi caricaturesca, todo lo que un r¨¦gimen militar pude tener de odioso. (. ..)Heredero del desastre, el sucesor de Sani Abacha, el general Abdulsalam Abubakar, ha hecho algunos gestos: liberaci¨®n de algunos opositores y periodistas, promesa de elecciones, de una transici¨®n hacia un r¨¦gimen civil. ?Pero cu¨¢l es su margen de maniobra? En la sombra, los generales millonarios, retirados o en activo, velan por su bot¨ªn y vigilan de cerca a su colega Abubakar. Los pa¨ªses occidentales deber¨ªan apoyar al general Abubakar, si es sincero, y hacer saber a sus compa?eros de galones que ya es hora de que dejen el poder.

13 de julio.