Por las fuentes del Palancia

Navajas se encuentra rodeada de parajes naturales atractivos, verdes y con abundante agua, que se pueden alcanzar despu¨¦s de un buen paseo y a temperatura agradable. Este es el principal recurso tur¨ªstico que transform¨® este t¨¦rmino municipal, de una superficie inferior a los ocho kil¨®metros cuadrados, en una colonia de veraneantes que en temporada estival multiplica por diez su poblaci¨®n de invierno. El recorrido por los paisajes del r¨ªo Palancia comienzan en el embalse del Regajo, perteneciente al municipio de J¨¦rica, utilizado para regar los campos de Sagunto y el Bajo Palancia. Constituye una amplia y c¨®moda zona para pasar la jornada al aire libre, con las actividades complementarias de la pesca y los deportes n¨¢uticos. La Fuente del Ba?o, con agua recomendada para tratar dolencias intestinales, es la primera que encuentra el visitante al continuar r¨ªo abajo. A principios de nuestro siglo, en 1910, aprovechando el tir¨®n que ofrec¨ªa el alto n¨²mero de veraneantes, se abri¨® un balneario y un hotel que en su libro de visitas registr¨® hu¨¦spedes ilustres. Probablemente este car¨¢cter elitista hizo que en los combates de la guerra civil del 36 el balneario fuera objetivo de acciones violentas. Muy cerca de la poblaci¨®n encontramos las fuentes de San Rafael, la Gilda y del Lugar, y as¨ª seguimos en siguientes espacios que acompa?an al r¨ªo con la fuente de la Pe?a, de tres ca?os, indicada para el colesterol y la m¨¢s cercana a la poblaci¨®n; la fuente de la Luz, con cuatro ca?os; la fuente del Hierro, con trece ca?os, inaugurada en 1925 en honor del rey Alfonso XIII, y la fuente de Mos¨¦n Miguel, canalizada en seis ca?os despu¨¦s de que el agua brota dentro de una cueva. Desde ella podemos contemplar el espect¨¢culo de la ca¨ªda de 30 metros de altura del salto conocido como Cascada del Brazal, y desde aqu¨ª se encuentra la indicaci¨®n para ir a la fuente del Curso. El tramo final del paseo de las fuentes se adentra en el paraje de la Bora de las Pe?as donde el r¨ªo se encaja entre roquedales formando recintos de agua muy agradables para tomar el ba?o. En uno de los estrechos se encuentra el llamado Salto de la Novia, nombre que procede de la leyenda m¨¢s popular del municipio. A todas estas fuentes se une el manantial de la Esperanza, del que se abastece la poblaci¨®n. Se encuentra en la falda de una monta?a que conserva las ruinas de un monasterio de los Jer¨®nimos y la ermita de la Esperanza, destino de una romeria el lunes de San Vicente Ferrer. El t¨¦rmino municipal dispone al otro lado del r¨ªo de dos cotas significativas camino de las poblaciones de Vall de Almonacid y de Gaibiel. Una se encuentra en Rasca?a donde se descubrieron restos de un poblado ib¨¦rico, a 512 metros de altitud, y el otro punto de ascenso es el Alto Mojonada, de 495 metros, destinos id¨®neos para una ruta de senderismo que busque contemplar la cuenca del Palancia desde un punto alto, teniendo como referencias visuales al norte la sierra Espad¨¢n y al sur la sierra Calderona, destino asimismo de numerosos veraneantes que huyen de la gran ciudad cuando aprieta el calor. Estos recursos naturales permitieron que Navajas desarrollara en el siglo pasado un aut¨¦ntico centro de vacaciones en el que el turismo social, pr¨¢ctica habitual en nuestro tiempo actual, actuara con car¨¢cter de actividad pionera en la sociedad valenciana. En el origen de encontrar una actividad cultural complementaria para los numerosos veraneantes se sit¨²a el amplio programa cultural que desarrolla el municipio. Funciona permanentemente una escuela de aprendizaje de m¨²sica y de jotas aragonesas, respaldada por las frecuentes actuaciones del grupo de jotas y la coral polif¨®nica A Capella. A estas actividades se une el ciclo de conciertos de c¨¢mara de verano, que ya cumple once temporadas, y la semana internacional de la trompeta.