Comp¨¢s de espera

La gran banca contin¨²a acaparando el castigo de los inversores cuando el viento de retirada domina sus motos. Los grandes bancos espa?oles, junto con Telef¨®nica, llevaron de nuevo hacia abajo el ¨ªndice de la Bolsa de Madrid. La bajada, ciertamente, fue m¨ªnima, pero se ha producido en una jornada en la que el resto de las bolsas europeas se han apuntado cuando menos modestas alzas.

Esto constata que la din¨¢mica propia del mercado espa?ol, alimentada por el peso de las inversiones en Latinoam¨¦rica de los principales bancos y grandes empresas de servicios, no s¨®lo provoca reacciones m¨¢s marcadamente negativas cuando ¨¦stas tienen car¨¢cter general, sino que puede incluso caminar por un sendero diferente.

La jornada burs¨¢til de ayer, como viene siendo habitual, comenz¨® con talante moderadamente optimista. Pero nadie debe llamarse a enga?o, siempre con un ojo puesto en el reloj a la espera del momento de recibir la orden de marcha definitiva: la evoluci¨®n del ¨ªndice de Wall Street. Para desesperaci¨®n de los inversores, esta ¨²ltima abri¨® sin apostar claramente, y enseguida se vio arrastrada por la inercia bajista. No en vano, el mercado madrile?o y el neoyorquino tienen en com¨²n su mutua preocupaci¨®n por las noticias que llegan de Latinoam¨¦rica, destino preferente de sus inversiones, en el primer caso, y destino importante de sus exportaciones, en el segundo. A partir de ese momento, la historia estaba escrita y s¨®lo quedaba esperar a que el cierre diera a conocer el porcentaje exacto de bajada que registrar¨ªa la Bolsa espa?ola.

En contraste, la mayor¨ªa de las restantes bolsas europeas mejoraban prudentemente sus posiciones a la espera de coyunturas m¨¢s claras que les permitan definir su futura trayectoria. El mercado de Par¨ªs se apunt¨® una ganancia del 1,21%. Londres, por su parte, registr¨® un alza m¨¢s modesta, del 0,94%, mientras que Francfort casi se quedaba igual y sub¨ªa el 0,17%. Tan s¨®lo Mil¨¢n, que perdi¨® un 0,31%, acompa?aba a Madrid.