La educaci¨®n b¨¢sica en la encrucijada

El d¨ªa 1 de septiembre, una vez m¨¢s, se abrieron los colegios e institutos y se inici¨® el ritual de siempre previo al inicio del curso escolar. Este a?o, sin embargo, hay una novedad importante: por primera vez todos los chicos y chicas de 15 a?os van a continuar escolarizados. Sin duda, esta prolongaci¨®n obligatoria y gratuita de la escolaridad es uno de los logros m¨¢s importantes de la LOGSE, ya que asegura una mayor igualdad de acceso a la educaci¨®n, al retrasar en dos a?os la elecci¨®n entre la vida acad¨¦mica y la profesional, y armoniza nuestro sistema escolar con el de otros pa¨ªses europeos. Parecer¨ªa, pues, l¨®gico que este hecho viniera acompa?ado del entusiasmo y la satisfacci¨®n de todos los sectores sociales implicados. Sin embargo, no es as¨ª y, por el contrario, reina un cierto des¨¢nimo, cuando no un rechazo manifiesto, ante el temor provocado por los constantes augurios que no han cesado de asociar la ESO con un descenso en los niveles de ense?anza y un menoscabo en la calidad. Augurios, todo hay que decirlo, que los responsables educativos del PP, lejos de combatir, han propiciado en numerosas ocasiones. Indudablemente uno de los objetivos m¨¢s importantes que la LOGSE se plantea en la educaci¨®n Primaria y Secundaria es conseguir que la totalidad del alumnado desarrolle sus capacidades personales y adquiera una formaci¨®n b¨¢sica lo m¨¢s completa posible que garantice su plena integraci¨®n como futuros ciudadanos y ciudadanas en una sociedad cada vez m¨¢s compleja. La LOGSE hace as¨ª una apuesta clara por la igualdad de oportunidades, por el tratamiento positivo de las diferencias y por tratar de evitar que el sistema educativo se convierta en un enorme contenedor de abandonos, repeticiones y fracaso escolar. L¨®gicamente, un objetivo tan ambicioso, pensado para toda la poblaci¨®n, no s¨®lo para las ¨¦lites, necesita contar con los medios materiales y humanos necesarios. De lo contrario, es cierto que hay una serie de riesgos reales y concatenados: la evaluaci¨®n y promoci¨®n autom¨¢tica de todo el alumnado provoca una heterogeneidad de los grupos que, si el profesorado carece de los medios para atenderla de manera adecuada, puede hacer imposible que mantenga el orden en clase y trabaje simult¨¢neamente en varios niveles y con metodolog¨ªas distintas. Ello da lugar a la consiguiente privaci¨®n para una serie de alumnos y alumnas del derecho a recibir una ense?anza adecuada a sus necesidades e intereses y esta situaci¨®n se agrava si, adem¨¢s, el alumnado con necesidades educativas especiales o el alumnado de alto riesgo de fracaso escolar no se reparte entre los centros sostenidos con fondos p¨²blicos, sino que se concentra y se escolariza s¨®lo en un tipo de centros. De ah¨ª la imperiosa necesidad de que la LOGSE se implante en las condiciones id¨®neas y en que cuente con todos los recursos para un tratamiento justo y eficaz de la diversidad, algo que, desgraciadamente, no est¨¢ ocurriendo en nuestra Comunidad. Es larga y conocida la lista de incumplimientos y deficiencias que la gesti¨®n del gobierno de Zaplana ha generado en estos tres a?os en el terreno educativo: el grav¨ªsimo d¨¦ficit en la construcci¨®n y adecuaci¨®n de centros que obliga a una ruptura de la ESO por la permanencia mayoritaria del primer ciclo en los centros de Primaria, la imposibilidad de coordinaci¨®n del profesorado que imparte los dos ciclos por la incapacidad de la Administraci¨®n para adscribir los centros de Primaria a los de Secundaria, la carencia del profesorado de apoyo necesario, la pr¨¢ctica inexistencia de una pol¨ªtica de formaci¨®n permanente del profesorado, la deficiente y err¨¢tica pol¨ªtica de personal, el mantenimiento de unas obsoletas instrucciones de funcionamiento de los centros que se remontan al a?o 92, cuando apenas si empezaba a aplicarse la LOGSE, etc, etc. Ante este panorama, es dif¨ªcil esperar entusiasmo y satisfacci¨®n, incluso en quienes defienden una educaci¨®n com¨²n como el medio m¨¢s eficaz para evitar la exclusi¨®n social y conseguir una sociedad m¨¢s equitativa y democr¨¢tica. Y se entiende el temor, cuando los responsables de la pol¨ªtica educativa no ponen en marcha ni est¨¢n dispuestos a ampliar, si fuera necesario, las medidas que la LOGSE contempla para atender de manera adecuada a la diversidad que existe entre el alumnado y evitar que ello pueda derivar en una bajada de los niveles. ?ste es el gran reto que plantea la nueva educaci¨®n b¨¢sica dise?ada en la LOGSE y es una grave irresponsabilidad del PP dejar que los centros educativos se enfrenten a ¨¦l con tantas carencias y deficiencias como las que actualmente padecen los de la Comunidad Valenciana..