Se estrella un cohete ucranio que portaba 12 sat¨¦lites estadounidenses

Doce peque?os sat¨¦lites comerciales de comunicaciones quedaron destruidos ayer al estrellarse el nuevo cohete ucranio C¨¦nit-2 poco despu¨¦s del lanzamiento desde la base espacial de Baikonur (Kazajist¨¢n), seg¨²n anunci¨® un portavoz de la Agencia Espacial Rusa. El C¨¦nit-2 era el primero de tres misiles bal¨ªsticos sovi¨¦ticos convertidos en lanzadores espaciales para poner en ¨®rbita 48 sat¨¦lites valorados en 380.000 millones de pesetas.

Los sat¨¦lites destruidos pertenecen a Globalstar Telecommunications, un consorcio internacional encabezado por la empresa estadounidense Loral Space and Communications. El accidente se debi¨® a un fallo en el ordenador del cohete.Viacheslav Mijailchenko, portavoz de la Agencia Espacial Rusa, declar¨® en Mosc¨²: "Hubo una orden err¨®nea en el sistema de guiado, 272 segundos despu¨¦s del lanzamiento; los motores del cohete C¨¦nit se apagaron repentinamente y ¨¦ste cay¨® a tierra". Mijailchenko no pudo precisar d¨®nde hab¨ªa ca¨ªdo el cohete exactamente, pero dijo que probablemente habr¨ªa sido en alg¨²n lugar de las regiones de Altai o de Jakasia, en el sur de Siberia.

El accidente supone un contratiempo muy grave para las industrias espaciales rusa y ucrania, que luchan por sobrevivir tras terminarse los subsidios de la era sovi¨¦tica y buscan un hueco en el creciente mercado mundial de lanzamientos de sat¨¦lites de comunicaciones.

El C¨¦nit-2 es un cohete de dos fases construido en la planta ucrania de Yuzhnoye en Dnipropetrovsk. Mide 57 metros de altura y 3,9 de di¨¢metro, pesa 449 toneladas en el despegue y es capaz de poner en ¨®rbita baja, a 200 kil¨®metros de altura, unas 13 toneladas de carga. Este a?o se hab¨ªan planeado dos lanzamientos m¨¢s con este sistema para poner en ¨®rbita 36 sat¨¦lites de Globalstar. El sistema de telefon¨ªa m¨®vil resultante deb¨ªa entrar en funcionamiento el a?o que viene.

El C¨¦nit tambi¨¦n es el cohete elegido para el sistema de lanzamiento desde plataformas marinas Sealaunch que desarrolla la compa?¨ªa Boeing, de EE UU, junto con el fabricante ruso Energiya y la empresa noruega Kvaerner. Este nuevo sistema de lanzar cargas al espacio, que aprovecha una plataforma marina reconvertida, est¨¢ t¨¦cnicamente preparado, pero de momento el proyecto se halla paralizado por problemas de transferencia de tecnolog¨ªa. Centenares de cohetes se han lanzado al espacio desde los a?os cincuenta, la inmensa mayor¨ªa con ¨¦xito, pero no han faltado las explosiones. Los dos fracasos m¨¢s recientes los ha sufrido Estados Unidos, con el estallido, el pasado 12 de agosto, de un potente cohete Titan IV (que llevaba un costoso sat¨¦lite militar estadounidense), poco despu¨¦s del despegue desde Cabo Ca?averal (Florida). Unos d¨ªas despu¨¦s estallaba el primer ejemplar del nuevo Delta III, con un sat¨¦lite de comunciaciones a bordo.

El pasado 17 de enero explot¨® el Delta II (EE UU), y el 3 de noviembre de 1997 fue destruido con una orden enviada desde tierra el cohete brasile?o VLS, con un sat¨¦lite meteorol¨®gico.

En el cap¨ªtulo europeo, el m¨¢s grave de los accidentes recientes fue la explosi¨®n del cohete Ariane-5 en su vuelo inaugural, el 4 de junio de 1996. En ninguno de estos accidentes se registraron v¨ªctimas, cosa que s¨ª ocurri¨® el 15 de febrero de 1996, cuando se estrell¨® el cohete chino Larga Marcha 3B poco despu¨¦s del lanzamiento desde la base de Xichang, y caus¨® al menos nueve muertos y 57 heridos en una poblaci¨®n cercana.