Justicia cambiar¨¢ su pol¨ªtica con los ni?os magreb¨ªes ilegales

La Generalitat anunci¨® ayer diversas medidas para modificar su actuaci¨®n con los menores magreb¨ªes que viven en situaci¨®n de desamparo en las calles de Barcelona, d¨ªas despu¨¦s de haber trascendido esta problem¨¢tica. "El problema nos ha desbordado", asegur¨® Ramon Buscall¨¤, m¨¢ximo responsable de la Direcci¨®n General de Atenci¨®n a la Infancia (DGAI), quien se reuni¨® durante m¨¢s de tres horas con representantes de diversas administraciones, cuerpos policiales, la fiscal¨ªa y el S¨ªndic de Greuges.

Buscall¨¤ afirm¨® que, pese a que la DGAI tiene transferidas todas las competencias en materia de tutela de menores, "el problema corresponde a todas las administraciones". Sin embargo, las principales medidas que fueron debatidas ayer deber¨¢ ponerlas en pr¨¢ctica la DGAI. As¨ª, la Generalitat se comprometi¨® a "reordenar a corto plazo sus recursos" y ampliar el n¨²mero de plazas de acogida de las que actualmente dispone en la ciudad de Barcelona para "mejorar la atenci¨®n" a estos ni?os. Tambi¨¦n anunci¨® que se elaborar¨¢ un nuevo modelo para "adecuar los servicios" hacia estos menores y que se crear¨¢ una comisi¨®n de seguimiento de todas las actuaciones. La DGAI estima que el n¨²mero de ni?os inmigrantes que no disfruta del amparo de una familia es de unos 160. S¨®lo una treintena ha pasado en alguna ocasi¨®n por un centro de acogida. La mayor¨ªa se concentra en Barcelona, Santa Coloma de Gramenet y otras municipios del ¨¢rea metropolitana. Centros de internado Buscall¨¤ afirm¨® que las actuaciones con este colectivo son muy dif¨ªciles, dada la agresividad que algunos de ellos muestran y su tendencia a escaparse. En su opini¨®n, con la ley en la mano no se puede obligar a un menor a estar interno en un centro, "que es lo que pide la sociedad". Sin embargo, en otro momento de su intervenci¨®n asegur¨® que la DGAI ha construido dos centros de estas caracter¨ªsticas y que ha sido criticada por esta iniciativa. El responsable de la DGAI entiende que, cuando el menor es conducido por la polic¨ªa a un centro de acogida de la Generalitat, facilita un nombre, una edad y una nacionalidad falsos, lo que dificulta su identificaci¨®n y posterior seguimiento. Esta situaci¨®n, seg¨²n las organizaciones que trabajan con este colectivo, se produce desde el pasado mes de enero, pero hasta ahora, por ejemplo, no se han adoptado medidas para facilitar su identificaci¨®n. Seg¨²n Buscall¨¤, la fiscal¨ªa realizar¨¢ una rese?a fotogr¨¢fica y con la polic¨ªa se intentar¨¢ aclarar su edad, ya que hay mayores de 18 a?os que se hacen pasar por menores. Seg¨²n Buscall¨¤, la fiscal¨ªa tambi¨¦n participar¨¢ en la redacci¨®n de un informe sobre la posible existencia de vac¨ªos legales para asegurar la protecci¨®n de estos ni?os. PASA A LA P?GINA 4