?Ciencia o seudociencia?

El rigor, esencial siempre en cualquier tipo de informaci¨®n, lo es m¨¢s si cabe en la relacionada con temas de salud. En este terreno, el error o la inexactitud no son inocuos. Tienen el efecto a?adido de desorientar, crear falsas expectativas y frustrar a un buen n¨²mero de personas que esperan de la medicina y de la investigaci¨®n cient¨ªfica el remedio al mal que les aflige. ?Es riguroso desde criterios informativos presentar como ciencia, al igual que la medicina o la biolog¨ªa, a la acupuntura y la homeopat¨ªa? ?Es igualmente riguroso rodear de un aura de novedad la comercializaci¨®n en el Reino Unido de una "p¨ªldora de la felicidad", pero pasando por alto que se trata de un antidepresivo, el Serotax, que se vende en Espa?a desde 1992? Son cuestiones, entre otras, que exponen algunos lectores como ejemplo de tratamientos informativos escasamente rigurosos e incluso sensacionalistas de temas referentes a la salud.A ra¨ªz de dos entrevistas publicadas en julio pasado en la secci¨®n de Sociedad, calificando sin m¨¢s de ciencia a la acupuntura y la homeopat¨ªa, un lector de Tres Cantos, Madrid, Carlos Garc¨ªa, llama la atenci¨®n sobre lo que considera "promoci¨®n sistem¨¢tica de remedios y curas no cient¨ªficas", al tiempo que lamenta "que se utilice a El PA?S, te¨®ricamente peri¨®dico de prestigio, para divulgar seudociencia". Este lector juzga grave "usar El PA?S para atacar el pensamiento cr¨ªtico y la raz¨®n, as¨ª como el derecho de los consumidores", y entiende que el Defensor del Lector debe intervenir. Otro lector, Ram¨®n Rabu?al, de Lugo, tambi¨¦n se?ala informaciones sobre temas de salud que, a su juicio, carecen de suficiente rigor, entre ellas, la titulada Adi¨®s a la verg¨¹enza (¨²ltima p¨¢gina de la edici¨®n del 6 de octubre) sobre la comercializaci¨®n de una denominada p¨ªldora de la timidez en el Reino Unido. Para este lector, se obvi¨® el dato de que el "f¨¢rmaco Serotax (paroxetina) es un inhibidor de la recaptaci¨®n de serotonina comercializado en Espa?a hace a?os". A su juicio, es una forma de dar la noticia que busca m¨¢s la an¨¦cdota que la informaci¨®n, lo que provoca en los pacientes "falsas expectativas que despu¨¦s son dif¨ªciles de resolver en la consulta diaria, ya que la fuerza de convicci¨®n de un medio de comunicaci¨®n es a menudo superior a la de un profesional aislado en su despacho". Esa carencia informativa se produjo, efectivamente. Pero el peri¨®dico la subsan¨® con posterioridad (edici¨®n del 11 de octubre) en un documentado art¨ªculo de Milagros P¨¦rez Oliva sobre las llamadas p¨ªldoras de la felicidad, en el que se afirmaba que el Serotax, "que es la marca m¨¢s conocida de la paroxetina, el antidepresivo que se ha presentado en el Reino Unido como la p¨ªldora de la timidez, se comercializa en Espa?a desde julio de 1992".

En cuanto a la queja del primer lector y a su petici¨®n de que el Defensor del Lector intervenga,hay que decir que no es la primera vez que lo hace, y de forma beligerante, en defensa de los postulados racionales en el tratamiento informativo de temas para o seudocient¨ªficos o que contengan elementos de ficci¨®n (Informaci¨®n frente a superstici¨®n, 26 de enero de 1997). La cuesti¨®n en este caso es determinar la naturaleza exacta de la acupuntura y la homeopat¨ªa para que la informaci¨®n sobre dichas materias sea tambi¨¦n exacta. Aunque el asunto es controvertido -y no s¨®lo por razones cient¨ªficas, sino por pugnas profesionales e intereses econ¨®micos-, es evidente que la acupuntura y la homeopat¨ªa no son ciencias en el sentido estricto del t¨¦rmino; tampoco puede decirse que sean seudociencias, sino simples pr¨¢cticas curativas de efectos inciertos y no comprobados de momento, al menos por los instrumentos de control al uso hoy d¨ªa. El autor de las entrevistas, Joaqu¨ªn Mayordomo, mantiene, por su parte, que "no s¨®lo es "ciencia" aquello que puede ser demostrado emp¨ªricamente". Y razona as¨ª su punto de vista: "En el tema que nos ocupa, el de la medicina, las fuentes citadas en mi informaci¨®n afirman que no puede considerarse s¨®lo "ciencia m¨¦dica" a la que mediante procesos de laboratorio puede mostrar su eficacia. Para nada est¨¢n de acuerdo en que se denomine "ciencia m¨¦dica" solamente a la "medicina oficial". Sencillamente, es cuesti¨®n de opiniones". Efectivamente, es cuesti¨®n de opiniones, por lo que no es correcto que el periodista avale en su informaci¨®n una de esas opiniones, convirti¨¦ndola de ese modo en un hecho comprobado: que la acupuntura y la homeopat¨ªa son ciencias, lo que por lo menos est¨¢ en discusi¨®n.

Como el tema, adem¨¢s de controvertido, tiene un inter¨¦s evidente para lectores y periodistas, el Defensor del Lector ha solicitado la opini¨®n del portavoz del Comit¨¦ Cient¨ªfico de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Emergencias en Madrid (SEMES-Madrid), Pedro Tarquis. Dice Tarquis: "La medicina occidental tradicional es una ciencia, aunque no una ciencia exacta, pero ciencia al fin y al cabo. Es decir, su pr¨¢ctica se basa en el conocimiento cierto del cuerpo humano y su funcionamiento, y en las t¨¦cnicas de tratamiento utilizadas, con unos resultados objetivos y demostrables. Otras pr¨¢cticas curativas denominadas medicinas alternativas deben a¨²n probar sus principios y eficacia, tal como ha hecho hasta la saciedad la medicina cl¨¢sica. Por ello, y aun siendo algunas de ellas inocuas (como la acupuntura y la homeopat¨ªa), la informaci¨®n rigurosa debe ce?irse u orientarse con el criterio de los entendidos, ya que si no puede convertirse involuntariamente en propagandismo y, por lo tanto, en manipulaci¨®n de la opini¨®n y de la salud".

"La acupuntura es una medicina tradicional oriental con visos de ciencia. Tiene un campo reconocido en el tratamiento del dolor; est¨¢ en estudio en diversos trastornos funcionales, y pendiente de una rigurosa evaluaci¨®n en otras ¨¢reas de la patolog¨ªa humana. La homeopat¨ªa, en cambio, se basa en principios f¨ªsico-qu¨ªmicos no demostrables ni aceptados como reales, y cuya aplicaci¨®n tampoco tiene conclusiones fiables que logren el apoyo del mundo acreditado cient¨ªfico y m¨¦dico. Por ello no puede ser avalada como ciencia m¨¦dica".