Un problema serio con las faltas

Fernando Hierro dio con su segundo gol una especie de pu?etazo encima de la mesa: ?ya est¨¢ bien de estropearnos nosotros mismos las faltas, de regalar los lanzamientos!, vino a decir con su tiro directo a la escuadra. Antes, el Madrid hab¨ªa vuelto a complicarse la vida en los libres directos con la man¨ªa de resolverlos en tres tiempos: uno toca en corto, otro frena el bal¨®n y un tercero golpea. Tres veces lo intent¨® as¨ª el cuadro blanco y tres veces se qued¨® sin garant¨ªas de remate. No lleg¨® a llevarse la pelota un rival, como en Mosc¨², pero siempre apareci¨® alguno a toda velocidad para entorpecer el disparo. Harto de concesiones, Hierro, a la cuarta, busc¨® puerta directamente, se ahorr¨® el tr¨¢mite de los toques previos, y marc¨®. Fue un gol con mensaje.Como tambi¨¦n dej¨® mensaje el primer tanto del Racing, que le volvi¨® a llegar al Madrid a bal¨®n parado, otra de sus cruces de la temporada.