S¨®lo el 7% de las demandas y querellas por negligencia m¨¦dica acaban en condena

Las demandas y querellas que se presentan por negligencia m¨¦dica no constituyen un buen indicador de la calidad de las pr¨¢cticas hospitalarias: s¨®lo el 7% de ellas acaba en condena, seg¨²n el presidente del colegio de m¨¦dicos de Madrid, Jos¨¦ Zamarriego. Los facultativos consideran crucial que la sociedad distinga n¨ªtidamente las negligencias -que deben perseguirse con m¨¢s eficacia que ahora- de los m¨¢rgenes admisibles de fallo cl¨ªnico, cuya eliminaci¨®n es una esperanza poco realista. El miedo a la demanda puede entorpecer y encarecer mucho la pr¨¢ctica m¨¦dica.

Zamarriego cita un ejemplo: con las t¨¦cnicas actuales, casi la mitad de los beb¨¦s prematuros que pesan al nacer entre 700 y 800 gramos acaba padeciendo alg¨²n problema neurol¨®gico. No es culpa de nadie: el siglo pasado, esos ni?os habr¨ªan muerto. Judicializar estos casos no ayuda en nada a reducir el porcentaje de malformaciones.Otro problema, siempre delicado en cuestiones sanitarias, es el de los costes de diagn¨®stico y tratamiento. Las t¨¦cnicas y los f¨¢rmacos progresan r¨¢pidamente, pero los sistemas p¨²blicos no pueden absorber indefinida e indiscriminadamente el coste de esos avances. No se puede hacer un esc¨¢ner a toda persona que se presenta en la consulta con una jaqueca. Sin embargo, algunas jaquecas acabar¨¢n revelando un problema cerebral grave. ?Cometi¨® negligencia el primer m¨¦dico que no aconsej¨® un esc¨¢ner?

El miedo a la demanda puede conducir a lo que Zamarriego llama "medicina defensiva", una especie de huelga de celo del m¨¦dico, que empieza a solicitar un volumen impracticable -o impagable- de pruebas diagn¨®sticas antes de arriesgarse a avanzar una conclusi¨®n.

La preocupaci¨®n por la judicializaci¨®n de la pr¨¢ctica cl¨ªnica se hace sentir entre los profesionales. El colegio de m¨¦dicos de Madrid ha decidio celebrar su primer centenario con unas jornadas sobre La responsabilidad civil y penal del m¨¦dico, que empezaron ayer en Madrid.

Las demandas no se reparten por igual entre las especialidades cl¨ªnicas. La gran mayor¨ªa se las llevan cuatro apartados: obstetricia, traumatolog¨ªa, anestesia y cirug¨ªa est¨¦tica.

Zamarriego y el vicepresidente del colegio, Leandro Plaza Celem¨ªn, se?alan dos posibles v¨ªas para evitar que los pacientes pierdan la confianza en los m¨¦dicos. La primera es que la Administraci¨®n disponga de fondos para compensar a los pacientes que sufren las consecuencias de un fallo cl¨ªnico en el que no hay responsabilidad dolosa del m¨¦dico. En este caso no habr¨ªa culpa, pero s¨ª compensaci¨®n econ¨®mica.

La segunda v¨ªa es mejorar la educaci¨®n del paciente y extender despu¨¦s la pr¨¢ctica del consentimiento informado, por el que el usuario acepta el margen de error admisible de la operaci¨®n o tratamiento a que se vaya a someter.