La capital del "remember"
M¨¢s all¨¢ del inequ¨ªvoco aroma nost¨¢lgico que desprende, el t¨¦rmino remember ( "recordar", en ingl¨¦s) aplicado a la m¨²sica podr¨ªa parecerle a cualquiera tan impreciso como escurridizo y, por supuesto, escasamente representativo de un estilo o una ¨¦poca: cualquier canci¨®n, artista o estilo del pasado, recuperado tras el paso de los a?os, podr¨ªa encajar en el calificativo. La popularizaci¨®n de dicha etiqueta, sin embargo, ha hecho posible que tal palabra vaya irremediablemente asociada a la m¨²sica que se bailaba en ciertas discotecas valencianas en los ochenta. Una variada dieta que combinaba el rock siniestro, el tecno de segunda generaci¨®n o el pop independiente brit¨¢nico y que, curiosamente, no era la misma de la que se nutr¨ªan los profesionales y aficionados de Madrid o Barcelona. "Mientras en la mayor parte del pa¨ªs se escuchaba mucho funky o dance, en Valencia se llevaba una m¨²sica m¨¢s oscura y minoritaria. Nos adelantamos al resto de Espa?a y ahora nos hemos anticipado a la moda del remember", explica el delegado local de la emisora M-80, Paco Cremades. Aunque ha sido desde principios de este a?o cuando, tras percatarse de las posibilidades comerciales, muchas discogr¨¢ficas han aprovechado para editar sus propios ¨¢lbumes recopilatorios de remember y, as¨ª, extender la moda nost¨¢lgica por todo el mercado nacional, fue en Valencia, hace unos cuatro a?os, cuando algunas salas (como la autoproclamada catedral del remember, Ku-Manises) y discogr¨¢ficas (Contrase?a fue la pionera) comenzaron a rebuscar en sus archivos esas canciones grabadas en la memoria colectiva de quienes, gracias a estas iniciativas, han podido volver a escuchar muchas de las piezas que dieron forma a la banda sonora de su juventud. Una m¨²sica que se ha revelado en las pistas de baile como un ant¨ªdoto contra propuestas ya rancias como el bakalao o la m¨¢kina. "Ha sido una sorpresa descubrir que el p¨²blico del remember se reparte al 50% entre gente que vivi¨® aquella ¨¦poca y otra m¨¢s joven que no conoc¨ªa estas canciones, pero que se ha enganchado a ellas", dice Cremades. Cuatro temporadas hace tambi¨¦n que el programa radiof¨®nico local 80 y Pop, dirigido por Tony Garc¨ªa y consagrado a la m¨²sica de remember, se instal¨® en la programaci¨®n de M-80. Para celebrarlo, la emisora decidi¨® reunir en un doble compacto, con el nombre del programa, 22 piezas representativas del g¨¦nero. "Es el recopilatorio m¨¢s aut¨¦ntico porque han sido los propios aficionados los que han escogido las canciones", apunta Cremades. El disco, que incluye a bandas tan dispares como Deacon Blue, Psychedelic Furs o Dissidenten, ha sido editado por Contrase?a, que se inici¨® en esta peculiar tarea de arqueolog¨ªa vin¨ªlica con la serie Maxi Pop, seguida de otras como Techno Pop o la expl¨ªcita Remember. "Lo que nos diferencia de otros sellos es que las personas que trabajamos aqu¨ª hemos vivido aquella ¨¦poca y disfrutamos buscando estos temas", se?ala Quique Borr¨¢s, jefe de producto de Contrase?a. Otro t¨ªtulo que incide en la fiebre del remember es Eighties, editado por Virgin y elaborado por el periodista valenciano Rafa Cervera, quien opina que el fen¨®meno obedece a la peculiar qu¨ªmica de la ciudad. "En Madrid, la gente a¨²n no sabe bien qu¨¦ es el remember, pero es s¨®lo cuesti¨®n de tiempo que se extienda por todo el pa¨ªs", dice.
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