Los 'padres' de la Constituci¨®n defienden su plena vigencia

La Constituci¨®n de 1978 est¨¢ vigente, es un gran logro de concordia y no exige reformas urgentes. En estos tres puntos estuvieron ayer de acuerdo seis de los siete ponentes que redactaron la Carta Magna que consagr¨® la soberan¨ªa del pueblo espa?ol en los inicios de la transici¨®n. Gabriel Cisneros, Manuel Fraga, Miguel Herrero de Mi?¨®n, Gregorio Peces Barba, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, Miquel Roca y Jordi Sol¨¦ Tura, convocados por la editorial Taurus, han escrito sus reflexiones 20 a?os despu¨¦s de concluir su tarea de redactores constituyentes.

El libro, que mereci¨® los elogios de los autores por la calidad de su edici¨®n, fue presentado ayer en el Congreso con la ausencia de Fraga, que excus¨® su asistencia por compromisos ineludibles.El acto congreg¨® a numerosas personas en la sala de columnas del Parlamento, con ausencia clamorosa de diputados -s¨®lo Manuel N¨²?ez y Bernarda Barrios, ambos del PP estuvieron presentes, junto a Matilde Fern¨¢ndez, del Grupo Socialista- que pudieron escuchar emociones, alguna confidencia y un canto generalizado, sereno y firme a la vigencia del texto constitucional y a su valor para aglutinar los 20 a?os de vida democr¨¢tica espa?ola. Miquel Roca, en una rueda de prensa previa al acto asegur¨® que el hecho de que al cabo de 20 a?os los ponentes sigan discrepando pero se muestren de acuerdo en lo fundamental sobre el texto constitucional expresa, justamente, su valor principal: la consagraci¨®n del derecho a la discrepancia civilizada.

Herrero de Mi?¨®n, que adem¨¢s ha coordinado los trabajos del libro, se alegr¨® de que la Constituci¨®n sea tan joven que sus padres "est¨¦n vivos y coleando" y destac¨® que el hecho de que los siete ponentes puedan presentar juntos sus trabajos simboliza "un hito en la historia reciente de Espa?a".

Los ponentes intervinieron en la presentaci¨®n, presidida por Federico Trillo, presidente del Congreso, por riguroso orden alfab¨¦tico. Gabriel Cisneros, que en 1978 militaba en UCD record¨®, entre otras cosas, que en su tarea no necesitaron "inventar ni una naci¨®n ni una sociedad", porque Espa?a exist¨ªa desde hace siglos y contaba entonces con una sociedad din¨¢mica y abierta. Cisneros se refiri¨® abiertamente a su pasado pol¨ªtico, al expresar que quienes, como ¨¦l, hab¨ªan colaborado con el r¨¦gimen anterior, tuvieron la idea clara de que era imprescindible "un pacto de reconciliaci¨®n nacional" y que "escuchar y acoger las razones del otro" era necesario para llevar a cabo con ¨¦xito la empresa de la transici¨®n.

Gregorio Peces Barba record¨® alguna an¨¦cdota para desmentir afirmaciones recientes como la del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, que ha asegurado que apenas particip¨® en la elaboraci¨®n de la Constituci¨®n. El ex presidente del Congreso cont¨® c¨®mo Arzalluz permaneci¨® una noche entera en su despacho, cuando con otros ponentes elaboraban la Carta Magna, para no ser descubierto por los periodistas apostados en la calle.

Jos¨¦ Pedro P¨¦rez Llorca se detuvo en explicar la realidad de Espa?a como Estado. El ex portavoz de UCD y ministro de Asuntos Exteriores en aquella ¨¦poca asegur¨® que "Espa?a no puede pervivir sin lazos afectivos y solidaridad com¨²n". Miquel Roca descubri¨® lo que llam¨® "una peque?a trampa" de la Constituci¨®n: "No la hicimos desde el consenso, la hicimos para el consenso", y se extendi¨® en explicar c¨®mo el texto de la Carta Magna es un logro y un reto para la convivencia en democracia.

Jordi Sol¨¦ Tura record¨® que en esa ¨¦poca representaba al PCE, que ya hab¨ªa tenido su primera confrontaci¨®n electoral con un decepcionante resultado para el partido de Santiago Carrillo, a quien todos citaron por su contribuci¨®n a la concordia. El pol¨ªtico catal¨¢n, ahora en el PSOE, record¨® que cuando empez¨® la elaboraci¨®n de la Constituci¨®n tuvo que sentarse con "Manuel Fraga, ministro de un Gobierno que me meti¨® en la c¨¢rcel". "Pero hab¨ªa que construir el futuro", dijo en tono sereno y sin acritud.

?Cu¨¢les eran los problemas que hab¨ªa que identificar? Las relaciones Iglesia-Estado, la escuela p¨²blica, el Ej¨¦rcito y, sobre todo, la estructura del Estado, seg¨²n las prioridades de Sol¨¦ Tura, quien confes¨® que le "obsesionaba el problema de las autonom¨ªas". Sol¨¦ Tura reconoci¨® que las apelaciones de hoy a la "relectura" de la Constituci¨®n le preocupan y pidi¨® prudencia a los actuales responsables pol¨ªticos.