El alcoholismo es la adicci¨®n que m¨¢s tratamientos requiere entre los m¨¦dicos
El servicio de ayuda creado por el Colegio de Barcelona se ofrecer¨¢ al resto de Espa?a
Ning¨²n colectivo es inmune a los problemas de drogadicci¨®n, y tampoco el de los m¨¦dicos, pero en su caso la drogadicci¨®n, adem¨¢s de un problema personal, puede tener graves consecuencias para sus pacientes. El caso del anestesista de Valencia Juan Maeso ha puesto crudamente de manifiesto un problema que el Colegio de M¨¦dicos de Barcelona ya hab¨ªa decidido abordar antes de que estallara el caso de los m¨²ltiples contagios de hepatitis en los hospitales de Valencia.Un total de 25 profesionales sanitarios son atendidos en estos momentos en el programa de atenci¨®n integral al m¨¦dico enfermo (PAIMM en sus siglas en catal¨¢n) creado por la entidad colegial para ayudar a los facultativos a superar problemas de adicci¨®n, drogadicci¨®n o trastornos mentales y proteger as¨ª, indirectamente, a sus pacientes. El 80% de los m¨¦dicos atendidos en este servicio son tratados por problemas relacionados con el alcoholismo, mientras que son minoritarios los casos derivados de problemas con drogas o trastornos mentales.
La editorial de la revista The Lancet, en su n¨²mero del mes de septiembre, citaba esta experiencia como una iniciativa pionera a escala europea. "Vamos a ofrecer al resto de colegios de m¨¦dicos espa?oles la posibilidad de beneficiarse de la atenci¨®n que presta nuestro servicio", indica el presidente del Colegio de M¨¦dicos de Barcelona, Miquel Bruguera. ?l mismo ser¨¢ el encargado de exponer el programa ante la primera asamblea estatal de colegios m¨¦dicos, que se celebrar¨¢ en el pr¨®ximo mes de enero.
"Nosotros ¨¦ramos conscientes de este problema por experiencias individuales que iban surgiendo en el trabajo diario, muy ocasionales, y nos pareci¨® que deb¨ªamos estar preparados para poder responder a la necesidad social de garantizar a los ciudadanos que los m¨¦dicos que les van a atender est¨¢n en buenas condiciones, tanto en lo que se refiere a preparaci¨®n t¨¦cnica como desde el punto de vista intelectual y emocional", indica Bruguera. El plan comenz¨® a esbozarse hace un a?o y medio. Tras su elaboraci¨®n y aprobaci¨®n por parte de la junta del colegio, se lleg¨® a un acuerdo con el Departamento de Sanidad para su puesta en funcionamiento. "El hecho de que el servicio haya sido subvencionado indica un reconocimiento de que este problema no puede abordarse correctamente desde los servicios de la red sanitaria ordinaria. Desde el Colegio de M¨¦dicos es m¨¢s f¨¢cil poder llegar al colectivo afectado y garantizar la confidencialidad de los pacientes", a?ade Jaume Padr¨®s, coordinador del PAIMM y secretario general del colegio. El presupuesto para esta unidad es de 90 millones de pesetas anuales, de los que 82 millones son aportados por Sanidad y el resto por el propio colegio.
En estos momentos el servicio atiende a 25 profesionales, pero la demanda es mayor. "La poca experiencia que tenemos hasta ahora es satisfactoria", afirma Jaume Padr¨®s, "y esto nos alienta a pensar que ¨¦sta es la v¨ªa correcta para abordar este problema y que puede servir de referencia incluso para otros colectivos profesionales y sociales. La clave del ¨¦xito es que sepamos transmitir al colectivo m¨¦dico que los datos sobre su identidad y su situaci¨®n se mantendr¨¢n bajo estricta confidencialidad en todo momento". El promedio de tiempo en el tratamiento ser¨¢, en general, de dos a?os. Durante los primeros seis meses se realiza una sesi¨®n de psicoterapia por semana, si el caso es de alcoholismo, a lo cual se a?ade el tratamiento farmacol¨®gico y psicoterapias de grupo y familiar. Durante el siguiente medio a?o se revisa o se confirma la terapia y en el segundo a?o se realiza un seguimiento de intensidad variable, en funci¨®n de la patolog¨ªa. "Nuestra previsiones es que tengamos en Catalu?a 54 casos nuevos al a?o. Se trata de estimaciones muy hipot¨¦ticas, pero tambi¨¦n prevemos que en los pr¨®ximos a?os se produzca un aumento de la demanda, en la medida que los afectados cojan confianza y comprueben que se garantiza la total discreci¨®n", explica el director del programa, Antoni Arteman.
Obligaci¨®n deontol¨®gica
Los problemas que se suelen presentar en los que acceden al programa son de tres tipos: alcoholismo, dependencia a otras drogas y trastornos mentales que pueden interferir en la pr¨¢ctica profesional correcta. Arteman estima que "entre el 8% y el 10% de los profesionales tiene a lo largo de su vida alg¨²n problema de este tipo".El programa descansa sobre una base s¨®lida: los nuevos art¨ªculos introducidos en el c¨®digo deontol¨®gico del colegio, que fue aprobado en la asamblea general del 16 de junio del a?o 1997. El art¨ªculo 91 indica que el m¨¦dico que se sepa enfermo tiene el deber de consultar a otro u otros colegas para que analicen su capacidad profesional y seguir las indicaciones que le sean dadas. Y el art¨ªculo 92 estipula que el m¨¦dico que sepa de otro facultativo que por sus condiciones de salud, h¨¢bitos o posibilidad de contagio pueda perjudicar a otros pacientes, tiene el deber, con la obligada discreci¨®n, de comunic¨¢rselo y est¨¢ igualmente obligado a ponerlo en conocimiento del Colegio de M¨¦dicos. La protecci¨®n de los pacientes ha de ser prioritaria.
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