Milosevic desencadena una purga de sus posibles rivales en el Ej¨¦rcito y los servicios secretos

El presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, lleva adelante una purga en el interior de su r¨¦gimen, iniciada a finales de octubre, tras la firma del acuerdo sobre Kosovo, con la destituci¨®n del jefe de los servicios secretos, Jovica Stanisic. La limpieza ha continuado con la ca¨ªda del general Momcilo Perisic, jefe del Estado Mayor, quien hab¨ªa criticado a la pol¨ªtica serbia. Neocomunistas y neofascistas se convierten cada vez m¨¢s en los ¨²nicos pilares del r¨¦gimen.

Las opiniones de los analistas se dividen a la hora de interpretar las depuraciones en el aparato de poder en torno a Milosevic. Unos las consideran como una contribuci¨®n para fortalecer el r¨¦gimen; otros las atribuyen a la debilidad, e incluso a la paranoia, que parecen haber atacado a Milosevic y su entorno.Los cambios, sin explicaciones, en sectores tan sensibles como los servicios secretos y el mando del Ej¨¦rcito, unidos a la represi¨®n en la Universidad y en los medios de comunicaci¨®n, parecen responder a una divisi¨®n de tareas entre las fuerzas pol¨ªticas m¨¢s extremistas del r¨¦gimen: los neocomunistas de Mirjana Markovic, la esposa de Milosevic, que preside el partido Izquierda Unida (JUL, en sus iniciales serbias), y los neofascistas del ultranacionalista vicepresidente de Serbia, Vojislav Seselj.

Los ultranacionalistas se ocupan de la limpieza en los medios de comunicaci¨®n y en la Universidad, ¨²nicos reductos de oposici¨®n de la sociedad serbia al r¨¦gimen de Milosevic. Al amparo de la firma de los acuerdos de paz sobre Kosovo, el r¨¦gimen serbio aprovech¨® la ocasi¨®n para desembarazarse de los medios de comunicaci¨®n hostiles con una nueva ley que prev¨¦ multas draconianas y confiscaci¨®n de bienes por procedimientos de urgencia.

La consecuencia ha sido que la mayor¨ªa de los peri¨®dicos de oposici¨®n de Belgrado han dejado de publicarse. La Universidad ha pagado caro su papel de foco de oposici¨®n durante las manifestaciones que siguieron a las elecciones municipales fraudulentas de finales de 1996. La nueva legislaci¨®n universitaria ha dejado la direcci¨®n de las facultades en manos de aut¨¦nticos comisarios pol¨ªticos, que exigen de los profesores pruebas de obsecuencia y adhesi¨®n al r¨¦gimen. Unas docenas de profesores han tenido el coraje c¨ªvico de renunciar a sus puestos y un catedr¨¢tico lleg¨® incluso a impartir sus clases en la calle de Belgrado, a la puerta de la facultad de la que unos esbirros le sacaron en volandas de su c¨¢tedra.

Los cambios en los servicios secretos y en el alto mando militar parecen una concesi¨®n a la esposa de Milosevic, que al frente de su partido, JUL, encabeza la l¨ªnea dura del neocomunismo serbio. Primero cay¨® el jefe de los servicios secretos, Jovica Stanisic, prototipo del represor inteligente, sustituido por el duro Radomir Markovic, ex jefe de polic¨ªa de Belgrado durante las manifestaciones contra el r¨¦gimen de principios de 1997. Ahora a Stanisic le ha seguido el jefe del Estado Mayor, el general montenegrino Perisic, quien a finales de octubre hab¨ªa osado criticar a los dirigentes pol¨ªticos de Serbia.