Cometas marineras

El turismo estacional no ha hecho otra cosa que copiar h¨¢bitos que algunas especies de animales desarrollan a lo largo del a?o. Con los fr¨ªos resulta mucho mejor bajar m¨¢s al Sur y descender en latitud, donde la climatolog¨ªa es m¨¢s suave. Las ¨¢guilas pescadoras nos visitan de forma frecuente en estas fechas y se quedan a pasar el c¨¢lido invierno que les ofrece la costa andaluza. En las marismas del Odiel, en Huelva, las condiciones son excelentes para vivir c¨®modamente. Buena pesca, refugio agradable y tranquilidad, que debieran mantenerse por mucho tiempo, en esta segunda Do?ana tan poco conocida y valorada. Como si de una cometa se tratase, describe c¨ªrculos en sus vuelos, buscando la evidencia de peces en la superficie de las aguas -dulces o saladas- para dejarse caer hasta introducir sus garras en el agua y atrapar a su presa. En su adaptaci¨®n ha desarrollado unas espinas en la parte inferior de sus dedos que la ayudan a atrapar con firmeza los peces que captura. Luego, toca comer, y para eso elige un ¨¢rbol o un tronco cercano. Con unos prism¨¢ticos, el espect¨¢culo est¨¢ servido para observar las alas angulosas -clara por abajo y parda por arriba- del ¨¢guila pescadora.