Alarma entre los reformistas iran¨ªes por la desaparici¨®n de otro escritor
Los temores de los reformistas y disidentes iran¨ªes de que existe una campa?a contra ellos por parte de los sectores inmovilistas ha cobrado verosimilitud con la desaparici¨®n, denunciada ayer, del escritor Mohamed Yafar Puyandeh y la muerte, conocida el d¨ªa anterior, de otro autor de la oposici¨®n laica y defensor de los derechos humanos, Mohamed Mojtari. "Nos hemos puesto en contacto con todas las autoridades pertinentes, incluidas polic¨ªa, hospitales y el dep¨®sito de cad¨¢veres, y no hemos encontrado rastro suyo", declar¨® a Reuters un familiar de Puyandeh, quien se encuentra en paradero desconocido desde que el mi¨¦rcoles por la tarde dej¨® su oficina de Teher¨¢n.Puyandeh, un escritor y traductor de 45 a?os, es el tercer autor que desaparece en el ¨²ltimo mes. Tanto ¨¦l como Mojtari, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado viernes por la polic¨ªa, se encontraban entre los seis destacados escritores e intelectuales que fueron cuestionados el pasado octubre por un tribunal revolucionario isl¨¢mico, por su intenci¨®n de relanzar la prohibida asociaci¨®n de escritores. Las quejas sobre la falta de seguridad de destacadas figuras reformistas o disidentes se han incrementado en las ¨²ltimas semanas, en especial a ra¨ªz del asesinato del veterano opositor Dariush Foruhar y de su esposa, Parvaneh. Tanto intelectuales como activistas de los derechos humanos vieron en la llegada al poder del presidente Mohamed Jatam¨ª (mayo de 1997) una oportunidad para salir del ostracismo. Sin embargo, los ¨²ltimos acontecimientos est¨¢n provocando una gran inquietud entre ellos.
"Estos asesinatos son parte de un esquema crecientemente siniestro de ataques y persecuciones contra quienes critican al Gobierno en Ir¨¢n", ha denunciado Hanny Megally, director ejecutivo de Human Rights Watch para Oriente Pr¨®ximo. Esta organizaci¨®n de defensa de los derechos humanos, que tiene su sede en EEUU, ha pedido al Gobierno de Teher¨¢n que investigue la muerte de Mojtari. El cuerpo del escritor mostraba magulladuras en el cuello, seg¨²n un familiar.
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